La Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se prepara para fabricar de millones de pruebas rápidas para COVID-19, aunque espera la autorización del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicas (InDRE) y el aval de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), así lo confirmó Catalina Stern, directora de la institución.
Asimismo, señaló que la intención es convertir dichas pruebas en diagnósticos caseros que estarían en venta en farmacias.
Sin embargo, admitió que aún no está claro quién aportará los recursos para la fabricación de las pruebas, ni quién se encargará de la comercialización.
“Cuando el proceso termine y el InDRE autorice, que espero sea la próxima semana, y luego Cofepris autorice también, necesitaremos fabricar millones de estas pruebas: ¿quién va a dar el dinero?, no es claro, ¿quién va a comercializarlos? Nosotros quisiéramos que llegara a un buen precio a todos los hospitales y centros de salud”, dijo.