Los diputados rusos aprobaron este miércoles una ley que otorga a Vladimir Putin el derecho a postularse a dos nuevos mandatos presidenciales, facilitando el camino para su posible residencia en el Kremlin hasta 2036.
Esta ley fue concebida para poner “la legislación electoral en conformidad con las nuevas normas de la Constitución”, de acuerdo al sitio web de la cámara alta del Parlamento, consecuencia del referéndum constitucional del verano (boreal) de 2020.
Una enmienda controvertida facilita que el presidente, de 68 años, se mantenga en el poder, pese a que teóricamente debería renunciar al final de su actual mandato, en 2024.
El límite de dos mandatos consecutivos existirá siempre, pero “esta restricción no se aplica a quienes hayan ocupado el cargo de jefe de Estado antes de la entrada en vigencia de las enmiendas a la Constitución”, señala el texto votado por los legisladores, por lo que Putin a puesto su contador nuevamente a cero.
Tras llegar al poder en el año 2000, Putin se retiró al finalizar su segundo mandato, en 2008, instalando en el Kremlin a su primer ministro, Dmitri Medvedev.
Luego de un intermedio de cuatro años, Putin fue reelegido presidente en 2012.
La revisión votada en el verano introduce también en la Constitución principios conservadores deseados por el presidente -la fe en Dios, matrimonio reservado a los heterosexuales, educación patriótica-, y también garantías sociales, como la indexación de las jubilaciones.
Retrasada una semana por la pandemia de Covid-19, la votación, cuyo resultado no despertaba la menor duda, finalizó oficialmente con la victoria del sí con el 77.92% de los votos y una participación del 65% de los diputados, de acuerdo a cifras oficiales.
El opositor Alexei Navalni había calificado esta consulta de “gran mentira” y la ONG Golos, especializada en el monitoreo de elecciones, la denunció como un atentado “sin precedentes” a la soberanía del pueblo ruso.