El cristal es una droga sintética que suele fabricarse en laboratorios ilegales
Veracruz reporta un aumento de 98.5 por ciento en el número de personas en tratamiento por consumo de cristal entre 2019 y 2021, advierte el Informe SISVEA (Sistema de Vigilancia Epidemiológica de las Adicciones) de la Secretaría de Salud Federal.
Los datos oficiales apuntan que el consumo de cristal registró un incremento en los dos últimos años, por lo que se ha convertido en la principal droga causante de tratamiento, con mayor impacto entre la población juvenil.
Durante 2019, el informe SISVEA reportaba que únicamente tres personas en tratamiento solicitaron ayuda por la adicción al cristal, lo que representaba el 1 por ciento del total de los usuarios atendidos en estos centros de tratamiento y rehabilitación no gubernamentales.
Posteriormente, en 2020, de 405 pacientes en tratamiento, el 38.5 por ciento (156) correspondió a pacientes atendidos por adicción al cristal. Durante el año pasado, 195 personas demandaron tratamiento por consumo problemático del cristal, lo que indica un alza de 98.5 por ciento (192) en el número de casos, con respecto a 2019.
Mientras que el alcohol fue clasificado como la droga de mayor impacto en 2019, para 2020 y 2021, el cristal (metanfetaminas) se posicionó como la sustancia psicoactiva de mayor consumo entre la población veracruzana.
Al respecto, la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud explica, en el reciente informe publicado en septiembre de 2022, que la droga de impacto es aquella que el paciente refiere con más capacidad de producirle efectos negativos (problemas), ya sea en el área de salud, familiar, legal o laboral, lo cual motiva la demanda de tratamiento.
Con base en información del Servicio Médico Forense (SEMEFO), el SISVEA 2021 documentó la mortalidad asociada al consumo de sustancias adictivas correspondiente a nueve entidades: Chihuahua, Ciudad de México, Hidalgo, Jalisco, Morelos, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo y Veracruz.
Los resultados señalan que los estados con mayor proporción de muertes reportadas bajo el influjo de alguna droga fueron Chihuahua, Morelos, Jalisco, Ciudad de México, Puebla, Quintana Roo y Veracruz.
La distribución por edad de defunciones asociadas a drogas, muestra mayor concentración en los grupos de 25 a 29 años, mientras que en el 2020 abarcaba desde los 20 años de edad.
Asimismo, el mayor número de defunciones por entidad de residencia asociadas al consumo de drogas se registra en Chihuahua (528), Morelos (486), Jalisco (283), Ciudad de México (199), Puebla (30), Quintana Roo (12), Estado de México (9) y Veracruz (5).
De estas defunciones asociadas con drogas, 89.7 por ciento eran hombres, lo que se traduce en una razón de nueve varones por cada mujer. De las 162 muertes ocurridas en mujeres donde se identificó alguna sustancia adictiva, trece estaban embarazadas (8 por ciento).
Por su parte, la Secretaría de Salud del Estado de Veracruz reporta un incremento en detecciones de drogas en pacientes que ingresaron en los centros de salud estatales: en 2019, detectaron 134 casos; en 2020, 183 registros; en 2021, documentaron 351 detecciones positivas; y hasta marzo de 2022, contabilizaron 18 casos.
Los Centros de Integración Juvenil (CIJ) documentan también un incremento en el consumo de las metanfetaminas por parte de usuarios de drogas solicitantes de tratamiento en estas instituciones, procedentes del estado de Veracruz.
Según el Sistema de Información Epidemiológico del CIJ, el consumo de metanfetaminas por parte de la población juvenil empezó a registrar una tendencia al alza desde el primer semestre de 2019, con 11. 5 por ciento del total de usuarios atendidos, por adicción a esta droga.
Entre el primer y segundo semestre de 2021, la droga de mayor impacto reportada por los usuarios en los Centros de Integración Juvenil fueron las metanfetaminas, con 43.3 y 41.8 por ciento del total de casos, respectivamente.
Según la investigación, publicada en marzo de este año, las metanfetaminas se han colocado como la droga de mayor impacto entre la población juvenil, superando a la cannabis y al alcohol.
La metanfetamina, también conocida como cristal, forma parte del grupo de drogas llamado estimulantes de tipo anfetamínico (ETA). Se trata de una droga sintética que suele fabricarse en laboratorios ilegales. Se vende en forma de polvo, tabletas o cristales que parecen astillas de vidrio.
Según datos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), la metanfetamina desencadena una sensación de bienestar físico y mental y una oleada de euforia y exaltación. El consumidor siente aumentar temporalmente la energía y suele considerar que mejora su rendimiento en labores manuales o intelectuales. Por lo general, deja de sentir hambre y cansancio durante cierto tiempo.
A corto plazo, puede provocar pérdida de apetito y respiración agitada. Es posible que se acelere el pulso y aumente la presión sanguínea y la temperatura del cuerpo, lo que causa sudoración. Si se consume en grandes dosis, puede causar inquietud e irritabilidad y pueden sufrirse accesos de pánico.
Las dosis excesivas de metanfetamina pueden dar lugar a convulsiones y ataques y a la muerte por insuficiencia respiratoria, infarto o insuficiencia cardíaca.
El consumo prolongado de metanfetamina puede provocar desnutrición, pérdida de peso y dependencia psicológica.
Cuando los consumidores crónicos la suspenden, suele sobrevenir un período prolongado de sueño y luego depresión. En ocasiones el consumo de metanfetamina desencadena una conducta agresiva, violenta y extraña.
El consumo de metanfetaminas contrae los vasos sanguíneos. En caso de enfermar por Covid-19, aumenta el daño a los pulmones y complica la recuperación de las personas.
En el ejercicio 2022, la Secretaría de Salud del Gobierno de México destinó 2 millones de pesos para el programa de Prevención, Atención y Tratamiento de Adicciones en el estado de Veracruz, luego de que en 2020 y 2021 registrara cero subsidios federales.
En la entidad se cuenta con 15 Centros de Atención Primaria en Adicciones (CAPA) y dos Centros de Integración Juvenil (CIJ) ubicados en Boca del Río, Coatzacoalcos, Córdoba, Martínez de la Torre, Minatitlán, Orizaba, Pánuco, Papantla, Poza Rica, San Andrés Tuxtla, Tuxpan, Veracruz y Xalapa.
También hay establecimientos especializados en su modalidad residencial y privado, que cuentan con reconocimiento de la Conadic (Comisión Nacional contra las Adicciones) “por demostrar su apego a la Norma Oficial NOM-028-SSA2 2009 para la Prevención, Tratamiento y Control de las Adicciones”, como la Fundación Casa Nueva IAP, ubicada en la localidad El Chico, municipio de Emiliano Zapata; y Abedul Life Center, en la ciudad de Orizaba.
Cabe mencionar que los Centros de Atención Primaria en Adicciones están adscritos a la Conadic, ofrecen un tratamiento gratuito y multidisciplinario para la atención del uso, abuso y dependencia leve o moderada a sustancias psicoactivas, el cual se brinda por psicólogos, médicos y trabajadores sociales, en donde la principal estrategia es la terapia cognitivo-conductual.
Además, atienden a familiares de personas que consumen sustancias y realizan actividades de prevención a través de sesiones informativas, talleres, coaliciones comunitarias y acciones para la detección temprana de factores de riesgo de consumo en adolescentes, con el objetivo de prevenir el consumo de sustancias o bien detener su progresión hacia el abuso o dependencia.
Con información de: Diario de Xalapa