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Aseguró que Citi fue el que decidió acabar con esta operación
El presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre el anuncio de la empresa Citi, en el cual dio a conocer que no venderá sus activos a Germán Larrea, el hombre al frente de Grupo México. Al respecto, el mandatario dijo que se suspendió la venta, debido a que se están buscando más garantías para esta acción.
«Es un asunto entre ellos», dijo antes de reiterar que en caso de que no se lleve a cabo esta adquisición, se hablará con la compañía para ver la posibilidad de que la administración federal realice esta compra.
«Nosotros sí necesitamos un banco», dijo.
Indicó que una sociedad pública-privada permitiría a los mexicanos que quieran comprar alguna acción formar parte de este negocio junto con la administración federal, la cual cuenta con posibilidades de hacer una inversión.
Destacó que la privatización en el sector bancario dejó al gobierno federal con las operaciones de solamente Bansefi, institución de la cual dijo pasó varios años abandonada. Dio a conocer que cuando se buscó convertirlo en el Banco del Bienestar su gestión tuvo varias complicaciones para esto.
El conglomerado decidió realizar una oferta pública inicial, con la cual se podrá registrar el interés de algún grupo empresarial o inversor privado por medio de la bolsa.
Mientras no haya algún comprador, Citi seguirá operando los 38 mil empleados, las mil 300 sucursales, la colección de arte y edificios históricos, así como la red de nueve mil cajeros automáticos, los 12 millones 700 mil clientes de banca de consumo, las 10 millones de afores y las seis mil cuentas de banca empresarial que tiene en la actualidad.
Desmintió que haya un acuerdo de pago de siete mil millones de pesos a Grupo México, de Germán Larrea, por la ocupación del gobierno federal de tres vías concesionadas a Ferrosur, subsidiaria de dicha empresa. Al ser cuestionado en la mañanera en Palacio Nacional sobre el supuesto acuerdo, que trascendió ayer en la prensa, el mandatario federal dijo que sí prevé un acuerdo, pero no económico.
La oferta del gobierno a Grupo México es “reestructurar su concesión”, sin dinero de por medio, dándoles un derecho de paso. También ofrecen a la empresa de Larrea “revisar, si es posible, si tienen una concesión que ya está por vencerse, ampliárselas”.
“Se va a llegar a un acuerdo, espero, pero no es dinero, es permiso de paso y revisión de concesiones sobre las mismas vías que están en poder de Grupo México”, dijo.López Obrador.
Enfatizó que lo que busca su gobierno “no es expropiación, es rescate de la concesión” de 120 kilómetros aproximadamente para que el gobierno tenga tener todo el circuito del Istmo de Tehuantepec, la parte del Tren Maya y los trenes de Guatemala a Ixtepec, de Salina Cruz a Coatzacoalcos, y de Coatzacoalcos a Palenque.
Con información de: El Heraldo de México
