Después de 365 días, el caso sigue sin esclarecerse y las labores de rescate de los restos de los 10 trabajadores atrapados continúan aplazándose
Este jueves se cumple un año de la tragedia ocurrida en la mina ‘El Pinabete’, en donde 15 mineros quedaron atrapados durante varios días, de los cuales solamente cinco pudieron salir con vida; después de 365 días, el caso sigue sin esclarecerse y 10 cuerpos permanecen atrapados.
Este día, la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) recordó aquel 3 de agosto de 2022, en donde un derrumbe en la mina de carbón en Sabinas, Coahuila, provocó la muerte de 10 mineros, cuyos cuerpos no han sido rescatados tras un año del fatal accidente.
Las autoridades prometieron a los familiares de los mineros que sacarían los restos durante los primeros seis meses después del accidente, poco después el “rescate” fue aplazado a 11 meses y luego, el propio presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), aseguró que sería en diciembre de 2023.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE), a quien los familiares de los mineros culpan, colocó tapones hidráulicos en la mina de Sabinas en pasado mes de julio del presente año para evitar que el agua siga entrando y entorpeciendo los trabajos de rescate de los cuerpos.
Durante el mes de septiembre de 2022, la Fiscalía General de la República (FGR), detuvo al presunto dueño de la mina tras emitir una orden de aprehensión por el delito de explotación ilícita de un bien perteneciente a la Nación, poco después Cristian ‘N’ solicitó un amparo, sin embargo, fue vinculado a proceso.
Los 15 trabajadores se encontraban sin las condiciones de seguridad y protección necesarias en la mina ‘El Pinabete’, cuando, según la CNPC, perforaron el techo de una galería que ocasionó la entrada de agua a gran presión de otra mina abandonada.
Protección Civil confirmó que el origen del incidente se asocia al proceso no controlado de explotación en la mina de Coahuila, que al acercarse demasiado a las galerías existentes e inundadas de la mina ‘Conchas Norte’, provocaron el “rompimiento” de las paredes del manto de carbón.
Esto ocasionó el ingreso súbito e incremento instantáneo de nivel de agua y lodos dentro de la mina ‘El Pinabete’, volviendo imposible que los trabajadores pudieran salir por su propia cuenta tras el derrumbe; después de varios días de trabajos de remoción, solo cinco mineros sobrevivieron.
Con información de: Crónica de Xalapa