Autoridades de el Cedral preparan la reubicación de 90 tumbas por la erosión del terreno; 10 cadáveres fueron arrastrados
El río Grijalva amenaza con ‘tragarse’ el cementerio ejidal y viviendas del sector Cedral de la colonia Gaviotas Sur, en Tabasco, una zona que recurrentemente resulta castigada en temporada de lluvias.
En esta ocasión, derivado del crecimiento del río, a causa de las lluvias del Frente Frío Número 8, el cauce arrasó con la margen natural de este afluente, lo que provocó que una decena de criptas sucumbieran y fueran a parar al fondo del agua con todo y difuntos; mientras que otras siete viviendas del callejón Los Almendros están en riesgo de caer.
Habitantes del Cedral, cuyos muertos descansan en ese panteón y autoridades municipales preparan un operativo para que se haga la reubicación de los restos humanos de al menos 90 tumbas.
Antonio Méndez, responsable del panteón, adelantó que mientras eso ocurre, cinco familias han decidido sacar los restos de sus familiares.
En el cementerio, donde existen mil 80 bóvedas, también yacen los restos de José Guadalupe, sobrino de Gustavo Alonso Palma, quien en entrevista dijo que “sí nos da temor que la erosión continúe avanzando porque cuando los sepultamos la tumba estaba como a cincuenta metros de distancia de la orilla del río Grijalva, ahora, la distancia es de sólo 10 metros”.
El gobernador Carlos Manuel Merino señaló que, aunque ya se está atendiendo la emergencia, la protección marginal tendrá que esperar hasta que llegue la temporada de ‘seca’, es decir cuando terminen las lluvias.
Siete viviendas en total se encuentran amenazadas de ser arrasadas por el río, sobre todo ahora que se esperan lluvias fuertes por el Frente Frío número 9.
José Arturo Gómez Asencio, coordinador de Protección Civil municipal, dijo que como medida de precaución se evacuó la zona, sin embargo, Cristina Delgado fue una de las personas que vio con desesperación cómo el río se llevó su vivienda.
“Mi casa tenía cuarto, baño, cocina. Ya llevabámos viviendo 10 años, fue un terreno que mi esposo compró en 120 mil pesos, pero ya hoy no nos ha quedado nada” dijo con preocupación.
Con información de: Excelsior