Cada 7 de diciembre se realiza un sendero luminoso de más de 1 km sobre las principales calles del centro de Xalapa
Cada 7 de diciembre en varios municipios veracruzanos se celebra el día del niño desaparecido. Esta tradición consiste en prender miles de velas siguiendo un camino luminoso para que el alma perdida de los niños encuentre la luz celestial que lo guie con Dios.
Según la tradición cristiana, Jesús se perdió en Jerusalén durante tres días en plena celebración de la pascua cristiana y sus padres no se dieron cuenta del hecho.
“Los padres de Jesús subían todos los años a Jerusalén para la fiesta de la Pascua. Cuando cumplió doce años, fueron allá según era la costumbre. Terminada la fiesta, emprendieron el viaje de regreso, pero el niño Jesús se había quedado en Jerusalén, sin que sus padres se dieran cuenta. (…) Al no encontrarlo, volvieron en busca de él. Al cabo de tres días lo encontraron en el templo, sentado entre los maestros”. Lucas 2: 41-45
Derivado de este hecho escrito en la biblia, en varios países católicos este 7 de diciembre se celebra el día del niño perdido, que consiste en hacer un camino largo de velas encendidas hasta llegar a un templo católico. Se tiene la esperanza de que el alma de aquellos niños desaparecidos pueda encontrar la luz para que aparezcan, o simplemente para que su alma, en caso de haber fallecidos sin que sus familiares lo sepan, pueda tener paz.
En el estado de Veracruz se tiene registro que en Tuxpan se llevó a cabo la primera representación de este hecho; sin embargo, en la capital, Xalapa, la celebración también se realiza. Las velas en la capital de Veracruz se encienden desde los Lagos para subir al parque Juárez y terminar en la catedral. Es una senda luminosa de más de 1 km.
Este martes 7 de diciembre se espera que cientos de Xalapeños salgan a dejar su velita en el centro de la ciudad.
Con información de: E-consulta Veracruz