La hipocondría, también conocida como trastorno de ansiedad por la salud, es un trastorno psiquiátrico prevalente caracterizado por la preocupación persistente por tener uno o más trastornos físicos graves y progresivos.
Las personas que son hipocondríacas tienen un mayor riesgo de mortalidad, principalmente por causas prevenibles particularmente por suicidio, que las personas que no son hipocondríacas, según señala un estudio sueco publicado en ‘Jama Network’.
En este estudio de cohorte emparejado a nivel nacional sueco de 4 mil 129 personas con un diagnóstico de hipocondría y 41 mil 290 personas demográficamente emparejadas sin hipocondría, aquellos con un diagnóstico de hipocondría tenían una tasa de mortalidad significativamente mayor que sus contrapartes sin hipocondría y un riesgo 84 por ciento mayor de mortalidad por todas las causas en comparación con las personas de la población general.
La hipocondría, también conocida como trastorno de ansiedad por la salud, es un trastorno psiquiátrico prevalente caracterizado por la preocupación persistente por tener uno o más trastornos físicos graves y progresivos. La preocupación va acompañada de una hipervigilancia y una interpretación catastrófica de los signos corporales, lo que da lugar a una conducta repetitiva y excesiva de control y búsqueda de tranquilidad o a una evitación desadaptativa.
Los síntomas son claramente desproporcionados y causan malestar y deterioro significativos. Se cree que la hipocondría está gravemente infradiagnosticada debido a que los profesionales de la salud no la reconocen ni la toman en serio de manera adecuada, así como a las connotaciones negativas asociadas con la etiqueta diagnóstica.
Sin embargo, como síntoma, la ansiedad por la salud es muy prevalente en los entornos de atención sanitaria y se asocia con un uso sustancial de los recursos sanitarios. La hipocondriasis se considera ampliamente como un trastorno crónico, con una baja probabilidad de remisión sin tratamiento especializado.
La población del estudio incluyó personas que vivieron en Suecia en cualquier momento entre 1997 y 2020 a la edad de seis años o más diferenciando entre aquellas que habían recibido un diagnóstico de hipocondría en esa fecha y las que no.
Tras el análisis, se muestra que la mayoría de las personas con hipocondría (85,7%) analizadas habían recibido al menos otro diagnóstico psiquiátrico en su vida, principalmente trastornos relacionados con la ansiedad y depresivos, en comparación con 8213 personas en el grupo sin hipocondría (19,9%).
Las personas con un diagnóstico de hipocondría tienen un riesgo de muerte por suicidio más de cuatro veces mayor en comparación con las personas de la población general. «Hasta donde sabemos, el riesgo de suicidio en este grupo no se había cuantificado previamente. Una revisión sistemática concluyó que los intentos de suicidio pueden ser menos frecuentes entre las personas con hipocondría que entre las personas sin ella, aunque los estudios incluidos tuvieron limitaciones metodológicas», señalan los autores.
Ante esta conclusión, los investigadores advierten de que los médicos deben ser conscientes de que las personas con hipocondría corren el riesgo de morir por suicidio, especialmente si tienen antecedentes de depresión y ansiedad en su vida.
Además, los datos revelan que las personas con hipocondría tienen un mayor riesgo de muerte por causas tanto naturales como no naturales en comparación con las personas sin hipocondría. Entre las causas naturales de muerte, las más comunes son las enfermedades del sistema circulatorio, las enfermedades respiratorias y los «síntomas, signos y hallazgos clínicos y de laboratorio anormales no clasificados en otra parte».
Asimismo, los riesgos de muerte por todas las causas y por causas naturales fueron mayores entre las personas que recibieron un diagnóstico por primera vez en entornos hospitalarios en comparación con las personas que recibieron un diagnóstico por primera vez en entornos ambulatorios, lo que sugiere que los pacientes con síntomas más graves o complejos que requieren hospitalización tienen más probabilidades de morir. El riesgo de muerte por causas no naturales no fue significativamente diferente entre los grupos, posiblemente debido al poder estadístico limitado.
Estos hallazgos ilustran una paradoja: las personas con hipocondriasis tienen un mayor riesgo de muerte a pesar de sus temores generalizados a la enfermedad y la muerte. Además, la mayoría de las muertes podrían clasificarse como potencialmente evitables.
Descartar los síntomas somáticos de estos individuos como imaginarios puede tener consecuencias nefastas. Se debe hacer más para reducir el estigma y mejorar la detección, el diagnóstico y la atención integrada adecuada (es decir, psiquiátrica y somática) para estas personas.
Con información de: Proceso