A pesar de los intentos del oficial por detenerla, Boone aceleró y escapó del estacionamiento, iniciando una peligrosa persecución por la autopista East Highway 40.
Una situación ‘de película’ se desarrolló en Florida cuando Kendra Boone, de 33 años, robó una patrulla de alguacil y desató una persecución a alta velocidad que terminó en una colisión fatal el jueves pasado.
El sheriff del condado de Marion, Billy Woods, no escatimó palabras al describir el incidente durante una conferencia de prensa el viernes, calificando a Boone como «una imbécil que robó un vehículo policial y mató a dos seres humanos».
La persecución comenzó cuando los oficiales respondieron a un reporte sobre un «incidente sospechoso» en un centro comercial de Silver Springs. Boone, según la Oficina del Sheriff del Condado de Marion, estaba presuntamente intentando arrebatar las llaves de una mujer mayor.
Cuando el oficial Chris Witte llegó al lugar en su patrulla alrededor de las 14:00 horas, instruyó a Boone a permanecer en la parte trasera del vehículo mientras él salía brevemente. Sin embargo, Boone aprovechó una oportunidad y se apoderó del volante a través de la ventana abierta del pasajero, como se muestra en un video de la cámara corporal.
A pesar de los intentos del oficial por detenerla, Boone aceleró y escapó del estacionamiento, iniciando una peligrosa persecución por la autopista East Highway 40. Según el sheriff Woods, Boone conducía a más de 100 millas por hora y de manera errática, evadiendo a los agentes que la perseguían.
La tragedia alcanzó su punto culminante cuando Boone perdió el control del vehículo robado e impactó de frente contra un camión pickup negro, resultando en la muerte de tres personas, incluida ella misma.
Las autoridades continúan investigando los detalles del incidente mientras la comunidad local lamenta la pérdida de vidas causada por esta serie de eventos desafortunados.
Con información de: Excelsior