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El gigante de hielo de la Antártida, conocido popularmente como el “Glaciar del Juicio Final”, muestra señales alarmantes de fractura e inestabilidad, su colapso podría reescribir los mapas del mundo tal como los conocemos
Seguramente has escuchado hablar del glaciar del Juicio Final y del colapso que generará a nivel mundial. En algunos sitios se ha dicho que será en los próximos años cuando genere un conflicto irreversible para el mundo, aquí te explico todos los detalles y la razón por la que hay alerta en la comunidad científica.
El glaciar Thwaites, situado en la Antártida Occidental es del tamaño aproximado de Gran Bretaña y ha sido objeto de vigilancia intensiva por parte de la comunidad científica. Según los últimos reportes, incluyendo análisis detallados de Wired, la situación es más crítica de lo que se pensaba por las siguientes razones:
Fracturas aceleradas: Al igual que el parabrisas de un coche que recibe un impacto, la plataforma de hielo que actúa como “freno” del glaciar se está llenando de grietas masivas. Estas fracturas se están propagando a velocidades sorprendentes, debilitando su estructura estructural.
El “ataque” desde abajo: Investigaciones recientes con robots submarinos han revelado que el agua cálida del océano se está filtrando en las bases del glaciar, erosionándolo desde abajo y acelerando su derretimiento en zonas que antes se consideraban estables.
Retroceso récord: En las últimas décadas, el glaciar ha retrocedido kilómetros y actualmente vierte miles de millones de toneladas de hielo al océano cada año, contribuyendo ya al 4% del aumento global del nivel del mar.
El peligro inminente: ¿por qué le llamamos “Del Juicio Final”?
En muchos medios se ha creado alarma porque se dice que acabará con la Tierra; sin embargo, no literal, sí generará cambios que podrían alterar al mundo como lo conocemos actualmente, principalmente porque actúa como un “corcho en una botella” para la vasta capa de hielo de la Antártida Occidental.
Su deshielo generará un efecto dominó: si el Thwaites colapsa, liberaría el hielo que tiene detrás. Por sí solo, su derretimiento total elevaría el nivel del mar unos 65 centímetros, eso sin duda sí causaría un efecto catastrófico para todo el mundo:
Catástrofe Global: Sin embargo, al perderse este “tapón”, se desencadenaría una reacción en cadena arrastrando a otros glaciares vecinos. Esto podría elevar el nivel de los océanos más de 3 metros en los próximos siglos.
Irreversibilidad: Los científicos advierten que estamos muy cerca (o quizás ya cruzando) un punto de inflexión irreversible. Una vez que la plataforma de hielo flotante se desintegre, el proceso de colapso del glaciar podría acelerarse dramáticamente, volviéndose imparable incluso si redujéramos las emisiones de carbono mañana mismo.
¿Cómo cambiaría nuestra vida en los próximos años?
Los cambios climáticos sí empezarán a sentirse en el 2026, aunque se ha dicho que no es un problema de hoy, y es verdad, lo cierto es que los efectos del glaciar del Juicio Final se sentirán en el corto y mediano plazo:
Rediseño de las Costas: Ciudades costeras como Nueva York, Miami, Shanghái, Londres y Ámsterdam enfrentarían inundaciones crónicas y eventualmente podrían quedar parcialmente sumergidas.
Crisis Migratoria: La pérdida de tierras habitables provocaría el desplazamiento de cientos de millones de personas, generando una crisis de refugiados climáticos sin precedentes.
Economía y Clima Extremo: La alteración de las corrientes oceánicas y la salinidad del agua afectaría la pesca mundial y los patrones climáticos, intensificando tormentas y huracanes.
La evolución del Glaciar del Juicio Final es un recordatorio urgente de la fragilidad de nuestro sistema climático. Lo que sucede en la remota Antártida tiene la capacidad de golpear la puerta de nuestras casas. La ventana de oportunidad para mitigar los peores escenarios se está cerrando, y la adaptación a un mundo con niveles de mar más altos parece ser, cada vez más, una necesidad inevitable.
Con información de: Crónica de Xalapa
