También, se perdieron por las inundaciones severas más de 30 mil hectáreas de cultivos de alimentación básica, como plátano, frijol, maíz, calabaza, jamaica y ajonjolí en los 16 municipios que conforman esta importante franja de la entidad que colinda con el estado de Oaxaca, indican reportes oficiales.
Desde este fin de semana, el gobernador Héctor Astudillo Flores se ha dedicado a recorrer las zonas afectadas en la franja costera, luego de que la noche del miércoles 13, decidió asistir a una fiesta en un cuartel militar en Chilpancingo en lugar de alertar a la población.
Ello a pesar de que el gobierno federal, a través de la coordinación nacional de Protección Civil, advirtió desde ese mismo día sobre las fuertes lluvias que iba a provocar el huracán Max en Guerrero, como Apro lo dio a conocer el jueves 14.
Hasta el momento, el gobernador Astudillo no ha dado una explicación pública acerca de la omisión de su gobierno para alertar a la sociedad con oportunidad, en un hecho que refleja una actitud de las autoridades similar a la tragedia provocada hace cuatro años por el huracán “Manuel”, el 15 de septiembre de 2013, cuando el exmandatario Ángel Aguirre Rivero y la clase política de la entidad optaron por celebrar en lugar de informar.
El recuento de daños
Reportes oficiales del gobierno estatal, indican que el mayor número de inmuebles inundados se registraron en el municipio de San Marcos, donde reportan, hasta el momento, 2 mil 181 viviendas afectadas, 800 de ellas con pérdida total y 20 comunidades incomunicadas, donde aún no se restablece el servicio de energía eléctrica y la población perdió todo su patrimonio.
Fue en este municipio considerado como la puerta de la Costa Chica donde se reportó la muerte de un hombre.
En el municipio de Florencio Villareal (Cruz Grande), se reportan 420 inmuebles afectados, 10 de ellos son considerados como pérdida total y seis poblados de afrodescendientes siguen incomunicados.
En el municipio indígena de San Luis Acatlán 300 casas se inundaron. En Tecoanapa, 245 inmuebles anegados, seis poblados incomunicados y se contabilizaron al menos 25 derrumbes sobre la vía carretera que conecta con la región Centro, a través del municipio de Juan R. Escudero.
Los informes oficiales indican que en el municipio afro de Juchitán, se reportaron
240 viviendas afectadas y cuatro comunidades incomunicadas.
Mientras que en el municipio con vocación turística de Marquelia, fueron 130 casas afectadas.
En otra demarcación afro denominada Copala, al menos 130 casas fueron dañadas y también se reportaron tres cortes carreteros sobre la vía federal Acapulco- Pinotepa.
En el municipio indígena de Ayutla de los libres, fueron 200 casas afectadas, cinco de ellas son pérdida total y tres deslaves que incomunicaron varias comunidades.
En Cuautepec se reportó la destrucción del puente La Hamaca en el poblado de La Bocanita y en el municipio afro de Cuajinicuilapa, fueron 150 viviendas inundadas, indican los reportes oficiales.
fuente: proceso