Limitada, muy limitada

Limitada, muy limitada

Si bien es respetable la opinión de la diputada Ana Miriam Ferráez, de un “toque de queda” como una forma de prevenir los feminicidios (según ella), delito que por sus números alarma a mujeres, colectivos, organizaciones y autoridades, hay algo que me hace mucho ruido, muy independiente de la posibilidad de violentar el derecho de cualquier persona a transitar por el país (o la entidad) a la hora que se le plazca: ¿los feminicidios se dan posterior a las diez de la noche? ¿tiene estudios, diagnósticos, datos de que así sea?
Si no es así, entonces estaríamos hablando de que se estaría sectorizando a un determinado grupo de mujeres que están fuera de su casa pasadas las 22 horas del día, como pueden ser aquéllas que visitan restaurantes, cafeterías, antros; las otras que salen o entran a trabajar, como algunas empleadas de medios de información, como enfermeras, algunas burócratas, y un sinfín de damas que por alguna razón u otra, tienen que estar fuera de casa en ese horario.
Ahora, siendo exagerados, la sentencia de la también secretaria de la Comisión para la Igualdad de Género en el Congreso local, es de un modo u otro, la revictimización de aquellas mujeres que después de las 22 horas fueron ultimadas… ¿en qué sentido? De acuerdo a su silogismo o propuesta, si una mujer sale en la noche será víctima de la violencia.
En torno a los feminicidios, un alto porcentaje de sus perpetradores, son conocidos y en el peor de los casos, parejas sentimentales, esposos, novios…

El pasado viernes me encontraba a una amiga que me platicaba su terrible experiencia ocurrida en la avenida Lázaro Cárdenas, cerca del Congreso local, cuando un sujeto se le acercó y empezó a decirle “cosas” y el miedo se apoderó de ella, y sólo atinó a tomar su celular, llamar al marido y gritarle que un tipo la estaba acosando, pero fue suficiente para que el sujeto se atravesara la avenida bajo el riesgo de ser atropellado pero todo por poner distancia de por medio entre la mujer y él… ¡ah! quizás parezca un hecho menor, insignificante, pero lo suficiente para que ahora, esta amiga vea en cualquier hombre un potencial depredador… y esto ocurrió al mediodía de un domingo…
La medida que propone la diputada es “mientras se frena la violencia contra las mujeres”…
Sinceramente no tengo la menor idea de cómo se va a frenar esto… incluso, la mañana de este lunes, después de que una amiga leyó a la Mujer que tocó el tema de los feminicidios, me exponía su preocupación de vivir en un país inseguro para las mujeres, ausente de valores, donde los padres de familia dejan todo en manos de la escuela y ceden todo a los hijos para evitar lidiar con ellos. Y uno se pregunta: ¿Dónde está la solución a este problema? ¿En una sanción más severa a los que cometan feminicidio, que sería entonces labor del gobierno? ¿Mayor seguridad? ¿Mayores medidas de prevención? ¿Y la familia? ¿los valores? ¿La erradicación del machismo?
Es escalofriante saber cuáles fueron las causas de la muerte de una mujer víctima de un varón… hay una constante siempre: la saña.
¿Por qué tanta saña en una mujer más que en el hombre hablando en la condición de género? Se sigue viendo a la mujer en una condición inferior, no sólo en la casa, no sólo en la calle, no sólo en el trabajo…
Uno trata de entender la buena fe de la diputada, porque es seguro que hay una intencionalidad sana en su “propuesta”… pero no deja de ser limitada… la propuesta… la propuesta…

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