La Universidad Veracruzana (UV), a través del Instituto de Ciencias de la Salud (ICS) y el cuerpo académico (CA) Drogas y Adicciones un Enfoque Interdisciplinario, realiza el estudio “Estado de ánimo y consumo de drogas durante la pandemia de Covid-19”.
El objetivo es que arroje información para evaluar el estado de ánimo (ansiedad, depresión y estrés), así como el consumo de drogas en la población mexicana de acuerdo con el confinamiento observado, informó Xóchitl De San Jorge Cárdenas.
La investigadora, que coordina la Red Veracruzana de Investigación en Adicciones (REVIVA), expresó que “guardando o no la cuarentena”, los mexicanos enfrentan una situación totalmente nueva que hace probable que el estado de ánimo se vea afectado por la amenaza del virus, así como a la propia economía y al modo de vida, situación que de prolongarse mucho podría incrementar el consumo de drogas o sustancias adictivas de la población que no sabe cómo manejar estas emociones.
Para este estudio, ocho académicas del ICS elaboraron un cuestionario de 34 preguntas sobre aspectos sociodemográficos, condiciones de salud, tipo de confinamiento al que está sometida la persona, consumo de drogas, síntomas de ansiedad, depresión y estrés autopercibido; para estos últimos aspectos utilizaron escalas psicológicas validadas internacionalmente que son usadas en México en estudios diversos.
La investigadora precisó que la encuesta, que es en línea y fue diseñada en Google, se está enviando a todo el país a través del correo electrónico y redes sociales (Twitter, Facebook, WattsApp e Instagram) utilizando la técnica bola de nieve, por lo que se espera contar con gran participación de personas en confinamiento.
Xóchitl De San Jorge explicó que a lo largo de la historia se han documentado brotes, epidemias y pandemias de infecciones respiratorias que han provocado la muertes de miles de personas en el mundo; después de más de un siglo un nuevo virus es la causa de una pandemia que amenaza la vida, en este caso el síndrome respiratorio agudo grave (SARSCoV-2) conocido como Covid-19, que tiene un alto índice de velocidad de propagación transmitiéndose de persona a persona a través de microgotas de Flügge, que se emiten al hablar, estornudar, toser, cantar o exhalar, su principal forma de difusión es cuando las personas están en contacto cercano, pero también al tocar una superficie contaminada y luego la cara.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoció la pandemia el 11 de marzo de 2020 y hasta el 5 de mayo había poco más de 3.7 millones de casos positivos en el mundo, 254 mil muertes y 1.2 millones de personas recuperadas, así como numerosos casos sospechosos, cifras que continúan creciendo.
Ante este panorama, el 16 de marzo la Secretaría de Salud (SS) federal anunció la “Jornada nacional de sana distancia” como estrategia de aislamiento social voluntario para prevenir la infección, con el objetivo de aplanar la curva epidémica de nuevos casos y casos graves, a fin de no rebasar la capacidad del sistema de salud. Aunado a ello, el 8 de abril se ordenó la suspensión de actividades no esenciales, se reprogramaron eventos de concentración masiva y se dio paso a la cuarentena, la cual se ha ido alargando conforme aumenta el registro de casos.
La Coordinadora de REVIVA refirió que de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), más de la mitad de la población del país está catalogada como pobres y extremadamente pobres, y que poco más de 31.3 millones se ubican en el sector informal sin acceso a seguridad social ni a un sueldo seguro constante que les permita enfrentar emergencias inesperadas, y menos aún capacidad de ahorro para ello, lo que les imposibilita seguir total o parcialmente las recomendaciones de la SS.
Retomando el tema de la encuesta, la investigadora universitaria mencionó que está dirigida a la población mayor de 12 años usuaria de Internet y otros medios electrónicos, y que considere que está siendo afectada por el confinamiento; los que participen con sus respuestas recibirán información inmediata sobre líneas telefónicas y virtuales en donde se les brindará asesoría psicológica y atención para la prevención del consumo de drogas y tratamientos de adicciones, “éste es un beneficio directo que brinda la investigación a los participantes”.