- Feligreses de los municipios de Catemaco, Santiago Tuxtla, Ángel. R. Cabada y hasta de Coatzacoalcos, acuden al Volcán San Martín por arrayán.
San Andrés Tuxtla, ver |
Por Sulamita Pólito Marcial |
Desde el mes de abril de 1847 se inició a celebrar la semana Santa en San Andrés Tuxtla, utilizando ramitas de arrayán (hojas verdes y ovaladas de flores blancas y olorosas) y hojas de palma, para bendecirlas y ornamentar el aposentillo en la iglesia católica.
El arrayán es una planta que nace cerca del Volcán San Martín, ubicado en la zona de los Tuxtlas, lugar en el que cada año acuden feligreses para traer ramitas de dicha planta y usarla en rituales religiosos durante la semana santa.
“Debido a que durante muchos años la gente acude a traer el arrayán, y últimamente acuden a aquella zona personas de otros municipios, como: Catemaco, Santiago Tuxtla, Ángel. R. Cabada, San Andrés Tuxtla y hasta de Coatzacoalcos, se está extinguiendo”, comentó el cornista de esta ciudad, Sixto Carvajal.
Asimismo dijo que existe gran cantidad de basura que dejan las mismas personas, lo que aumenta el peligro de esta planta, por ello, dijo que sería favorable que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), voltearan a la región de los tuxtlas para vigilar adecuadamente el uso que se le da el arrayán, ya que también tienen uso medicinal y podría haber personas que abusan de la extracción de la misma, para comercializarlos.
“Anteriormente había mucho respeto hacia esta reliquia, porque la gente las conservaba, colocando las ramitas bendecidas en la puerta de sus viviendas o cuando una persona fallecía se le colocaba entre sus manos, pero actualmente las cosas han cambiado”, comentó.
Hoy en día la juventud ya no aprecia tanto este ritual religioso como antes, porque han dejado de preservan la flora de esta región, misma que forma parte de la reserva ecológica, por lo que es necesario que las autoridades visualicen su extracción.
Ante lo anterior, también se le exhorta a la comunidad católica para que comprendan la situación, apoyen a proteger dicha planta y evitar que se extinga, para que las próximas generaciones continúen usándola adecuadamente.