El presidente envió a la Cámara de Diputados una iniciativa preferente para cambiar contratos con productores privados de electricidad.
El presidente Andrés Manuel López Obrador envió a la Cámara de Diputados como iniciativa preferente una reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que privilegia a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y cambia condiciones a los productores privados.
Al ser preferente, los diputados deberán tramitar la iniciativa en un plazo máximo de 31 días naturales. Si al término de este plazo no se hubiera discutido, ni votado, entonces deberá ser el primer asunto en abordarse en la siguiente sesión del Pleno y de ser aprobado, será turnado al Senado, que deberá procesarla también en 31 días.
La iniciativa contempla llevar la “Nueva Política Energética” del actual gobierno a la ley; con ello, se dará prioridad a las hidroeléctricas de la CFE en la alimentación del sistema eléctrico nacional
El segundo lugar del orden de prioridad quedaría lo generado en otras plantas de la CFE; en tercero, la energía eólica o solar de particulares y, al final, la energía de ciclo combinado de empresas privadas.
Además, la iniciativa instruye al diseño de un nuevo contrato de entrega física de energía y capacidad para compañías privadas.
“Las reformas en materia energética que diseñaron el modelo de mercado eléctrico en México dieron lugar a contratos de cobertura eléctrica que establecen con prelación los precios de energía y capacidad. Sin embargo, estos contratos financieros, al no comprometer la entrega física de energía y capacidad, ponen en riesgo y vulnerabilidad financiera a las entidades que lo celebran”, indicó el Ejecutivo en la exposición de motivos.
“Con la iniciativa se logrará terminar con la simulación de precios en un mercado que favorece la especulación, el dumping y los subsidios otorgados a participantes privados por la CFE, así como con años de saqueo y con el reconocimiento de los costos totales de generación, lo que permitirá una competencia en condiciones de equidad entre los participantes del mercado”, agregó.
Con los cambios en la ley, de acuerdo con la iniciativa, el gobierno podrá revisar la legalidad y rentabilidad de los contratos suscritos con productores privados y garantizará que los permisos se encuentren sujetos a los criterios de planeación emitidos por la Secretaría de Energía.
Otros cambios que plantea la iniciativa de reforma son:
Otorgar Certificados de Energías Limpias sin depender de la propiedad o fecha de inicio de las operaciones comerciales de las centrales eléctricas.
Eliminar la obligatoriedad de comprar por subastas para el Suministrador de Servicios Básicos.
Obligar a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) a revocar los permisos de autoabastecimiento, así como sus modificaciones, en los casos que hayan sido obtenidos mediante actos constitutivos de fraude a la ley.
Sobre este último punto, el titular del Ejecutivo acusó, como ya lo ha hecho anteriormente Manuel Bartlett, director general de la CFE, que empresas con permisos de autoabastecimiento han sumado “socios de paja” que en realidad son clientes a quienes les venden energía, lo que ha creado un “mercado paralelo de electricidad”.