El presidente de México invitó a la gente a tener paciencia, ya que si los uniformados son inocentes, serán liberados
El presidente Andrés Manuel López Obrador fue cuestionado sobre las marchas a favor de la Secretaría de la Defensa Nacional que se hicieron en algunos estados de la República Mexicana. Al respecto, el mandatario dijo que se debe de respetar el libre ejercicio de las ideas y se debe dar garantía a que la gente solicite el cumplimiento de sus derechos.
«En una dictadura no se podría hablar», dijo.
Durante la conferencia matutina del martes en Palacio Nacional, el mandatario dijo que durante su sexenio se vive un proceso de transformación que permite la libertad de expresión al punto de que incluso es posible insultar al presidente sin que haya un castigo por parte de las autoridades.
Estas declaraciones fueron repetidas durante su encuentro ante la prensa este miércoles, en la cual exhortó a los manifestantes a tener confianza de se hará justicia con sus familiares presos y a nadie les fabricarán delitos. Dijo que los que se manifestaron el pasado domingo en las marchas están en su derecho, aunque su gobierno no aceptará presiones ni chantajes.
“Entonces, que tengan confianza si sus familiares son inocentes, si no cometieron ningún delito van a ser atendidos, escuchados y si están en la cárcel liberados si son inocentes, que tengan confianza porque no fabricamos delitos”, dijo.
El pasado domingo, militares en activo, en retiro, familiares y simpatizantes marcharon en varios estados del país tras la detención de solados en Nuevo Laredo, Tamaulipas, acusados de la ejecución de cinco jóvenes que viajaban en una camioneta en esa ciudad.
Cerca de 50 personas protestaron en los accesos principales de la 35 Zona Militar, con sede en Chilpancingo, Guerrero, para exigirle al presidente, Andrés Manuel López Obrador, que sean liberados los cuatro elementos del Ejército que fueron detenidos por el homicidio de cinco jóvenes en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
En la acción de protesta, que inició poco antes de las 10 de la mañana, participaron familiares de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), incluidos menores de edad, y ciudadanía en general, la mayoría vestidos con prendas color verde olivo.
Durante la protesta exigieron el respeto a los derechos humanos de los elementos del Ejército y le pidieron al presidente que muestre su respaldo a la institución.
Los manifestantes llevaban cartulinas en las que se leían diferentes consignas, como “soldado, amigo, el pueblo está contigo”, “los delincuentes no tienen derechos humanos”, entre otras.
A principios de marzo, cuatro soldados fueron vinculados a proceso por el delito de desobediencia, esto luego de que el 26 de febrero dispararon contra cinco jóvenes que viajaban en una camioneta, quienes perdieron la vida, por lo que fueron recluidos en una prisión militar.
De una forma pacífica, alrededor de 40 familiares de elementos del Ejército Mexicano marcharon de la puerta principal de la Décima Segunda Región Militar a la puerta del Octavo Regimiento Blindado de Reconocimiento. La protesta con pancartas se llevó a cabo este domingo; inició a las 10 de la mañana y concluyó una hora y media después.
Entre pancartas, mujeres, hombres y niños, levantaban la voz a favor y como respaldado a los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) que día a día son víctimas de abuso y vejaciones. Pero principalmente exigían al presidente de México, la liberación de los cuatro militares que el domingo 26 de febrero fueron detenidos en Nuevo Laredo, Tamaulipas, por matar en una persecución a cinco jóvenes que escapaban en una camioneta, por huir de la autoridad y porque presuntamente podrían estar vinculados a la Delincuencia Organizada.
Demandaban que mejor los delincuentes están libres y en este sentido hicieron un llamado al mandatario nacional a defenderlos, ya que descalifican que tienen más derechos los criminales que los servidores de la nación.
Entre la marcha, destacaban pancartas como: «Apoyo total al Ejército», «El Ejército no se toca», «Señor no se equivoque, vengo por mi propia voluntad», «El Ejército se respete» y «Queremos un presidente que respete al Ejército».
Asimismo durante la manifestación, gritaban a una sola voz: «¡No están solos, estamos con ustedes!», «¡que los suelten!» y «Se ve se siente, el Ejército está presente». La marcha en Irapuato fue una de las más de cincuenta que se llevaron a cabo en diferentes partes del país en apoyo a las fuerzas armadas y sus demandas, como parte de una convocatoria de apoyo que se publicó a través de las redes sociales.
Un pequeño grupo de ciudadanas y ciudadanos protestó frente a Palacio de Gobierno, en la zona centro de esta ciudad de Xalapa, para exigir la liberación de los militares que fueron detenidos y vinculados a proceso tras la muerte de cinco jóvenes en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Las personas se plantaron sobre la escalinata de la Catedral Metropolitana de Xalapa con banderas mexicanas, pancartas y lonas, donde se leían diversos mensajes como: “mi total apoyo al Ejército Mexicano” y “fuimos creados para vencer y no para ser vencidos”.
Los quejosos también se concentraron sobre el parque Benito Juárez, a un costado del Palacio de Gobierno, para exhibir la situación a la población xalapeña y solicitar a más personas a que se sumaran al movimiento, pues se convocó a esta manifestación a nivel nacional.
Mencionaron de manera anónima por cuestiones de seguridad que la protesta es para apoyar a los militares, quienes, a su juicio, además de apoyar en labores de seguridad nacional también participan en acciones humanitarias en caso de desastres naturales.
“Estamos aquí concentrados en esta plaza, estamos en apoyo a nuestros hermanos del Ejército Mexicano, pueden ver en los medios de comunicación el problema que tuvieron en Nuevo Laredo, pero se da en todas partes de nuestro país”, enfatizaron.
El conflicto con los militares ocurrió el pasado 26 de febrero en la colonia Manuel Cavazos Lerma, al norte del país, donde los pobladores agredieron a los elementos, bajo el argumento de que los cinco jóvenes eran inocentes. Una de las versiones que ha circulado sobre este caso es que los abatidos presuntamente pertenecían a una banda delictiva y que los militares repelieron una agresión con arma de fuego.
Los elementos del Ejército Mexicano están siendo investigados y fueron ingresados a la prisión del Campo Militar 1-A, aledaño a la sede de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en el Estado de México. El reporte militar señala haber visto una camioneta con las luces apagadas y, al marcarles el alto, aceleraron, después de esto se escuchó un estallido fuerte, una presunta detonación de arma de fuego, por lo que los oficiales reaccionaron.
Ahora los militares están detenidos por desobediencia, pues presuntamente dispararon contra los cinco jóvenes sin orden ejecutora. Los civiles habían salido de un antro y se dirigían a sus casas.
Con información de: El Heraldo de México