Al interior del PRI, se debate quién debe ser el candidato por la gubernatura. Por un lado, hay quienes ven a Pepe Yunes Zorrilla como el ungido natural para tal cargo, y por otro, hay quienes ven en Héctor Yunes Landa, como candidato “lógico” para la contienda en pos del 2018. Mientras eso ocurre en el otrora partidazo, en el PAN, bueno, en el PAN no, en la familia Yunes Márquez tienen más claro las cosas: Miguel Ángel “Yunior” y Fernando serán gobernadores, según doña Leticia, esposa del actual mandatario estatal, quien si bien dijo estar bromeando, no podemos dejar de responder que entre broma y broma…
II
Los priístas viven en ascuas, más los que apuestan a Pepe Yunes Zorrilla pues acaban de pasar dos eventos en los que esperaban que el Senador sacara la casta y nomás no ven agallas en el de Perote. Nos referimos al acto agrarista donde la gente se volcó en un grito: “¡Pepe! ¡Pepe! ¡Pepe!” y cuando éste tomó la palabra, institucional, respetuoso de los tiempos, ortodoxo como es, la ovación la llevó para su tocayo, Pepe Toño Meade Kuribreña, donde ponderó milagros y virtudes del santo hombre.
Entonces llegó su quinto informe, y cuando uno esperaba algo parecido a lo que hizo “Chiquiyunes”, cuando el alcalde de Boca del Río da un discurso parecido a una despedida pero remata con un “nos vemos pronto” generando una expectativa de que lo hemos de ver en la contienda del 2018, Pepe Yunes Zorrilla lo vuelve a hacer… deja a los priístas en ascuas y si bien da un informe lleno de datos, éste carece de expectativa, al menos para el priísta o pro-Pepe.
III
Por otro lado, para quienes dicen que Héctor compitió y perdió y debería de dejar su espacio a Pepe Yunes, olvidan pronto la historia reciente. Un ejemplo: Un Yunes compite para Gobernador y pierde; seis años más tarde, vuelve a contender ¡y gana! Hoy es el Gobernador actual. Otro ejemplo: En 2006, Pepe Yunes Zorrilla compite para la senaduría y pierde; seis años después, es Senador; ¿quieren otro ejemplo? En el 2004, Héctor Yunes Landa compite por el distrito de La Antigua y pierde ante El Potro Francisco Fernández Morales… tres años después , es diputado local, y aún más, jefe de la Jucopo… si aplicáramos la lógica de la ilógica política, se podría decir que Héctor Yunes (basados en estos ejemplos) es “el candidato natural” en aras de contender por la gubernatura, aunque parece que Cuitláhuac García Jiménez, potencial candidato a la Gubernatura por Morena, entiende el mismo mecanismo que aquí presentamos por lo que, si fueran Héctor y Cuitláhuac a la contienda 2018, romperían la lógica de la ilógica política y entonces nos encontraríamos con un nuevo escenario que desconocemos su potencial resultado.
IV
Por otro lado tenemos los vaticinios de la señora Leticia Márquez, palabras más, palabras menos: “voy a tener dos hijos gobernadores”… si la memoria no nos traiciona, Miguel Ángel Yunes Márquez ha competido en tres elecciones, dos para alcalde y una para diputado local, donde no conoce la derrota… si bien hay dos elementos que pudieran ser sus fuertes como potencial candidato a la Gubernatura como son su trabajo en la ciudad de Boca del Río (los boqueños, ajenos a filias y fobias, pueden hablar mejor que yo de ello) y el trabajo del Gobernador, su padre… pero, si basamos la candidatura en su trabajo en Boca del Río, tendríamos que postular como candidatos por la Gubernatura (en sus justas proporciones) a Juan Manuel Diez Francos y a Américo Zúñiga Martínez, alcaldes de Orizaba y Xalapa cuyos trabajos son destacables aunque ello no signifique que ellos sean re-conocidos en el resto de la entidad… y en cuestión de percepción, tanto dentro o fuera de las redes, los ciudadanos podrían hablar mejor de lo que ha sido el trabajo del Gobierno del Cambio ¡en las urnas! Si gana Chiquiyunes, los veracruzanos estarían avalando el trabajo del Gobernador; perder, sería lo obvio.
Lo único cierto es que los pepistas no ven con arrojo a su candidato; Héctor sigue presionando por ser tal, y doña Lety, en una de ésas, tiene razón, salvo con un ligero detalle: la señora no dijo en qué año podrían ser gobernadores Miguel Ángel Yunior y Fernando, sus hijos.