By 
Uno o dos desvelos por las fiestas no suele ser preocupante, pero si influye para crear nuevos hábitos de sueño no reparador
Aunque es una práctica común desvelarse en el periodo vacacional de diciembre, especialistas enfatizan en la importancia de la higiene del sueño pues dormir ocho horas diarias es esencial para que el cerebro tenga las competencias para las áreas emocional, de pensamiento y de movimiento.
En conferencia híbrida de promoción de la salud apuntaron que cuando no se duerme bien y suficiente puede haber un incremento del apetito con el riesgo de caer en un desequilibrio de la glucosa en sangre o en otros parámetros metabólicos.
¿Qué enfermedades pueden ocasionar estas alteraciones? Diabetes, hipertensión e hipercolesterolemia son algunas de las citadas por la psiquiatra Eloísa Campos Ortiz.
Indica que uno o dos desvelos por las fiestas no suele ser preocupante, pero si influye para crear nuevos hábitos de sueño no reparador, sí se está en riesgo de tener consecuencias.
“Cuando estamos despiertos más de lo necesario, el cuerpo activa su sistema de alerta, hay más secreción de adrenalina, con aumento en la frecuencia cardiaca, sudoraciones, palpitaciones, dolor de cabeza, ansiedad, angustia e irritabilidad”.
Entre las recomendaciones para no alterar los ritmos individuales, sugiere tener horarios establecidos y mantener una habitación con capacidad en la regulación de la luz.
Además, acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, incluso en los fines de semana, así como alejarse de los dispositivos electrónicos que emanen luz, desde dos horas antes de dormir.
Entre otras sugerencias enumeró evitar la siesta de más de 30 minutos, evitar bebidas que contengan cafeína después de las 14:30 horas, así como realizar actividades relajantes con el mínimo de luz si al trascurrir 15 minutos de haberse acostado no se concilia el sueño.
Además, enfatiza que hay quienes no saben que si ya tienen problemas del sueño, sí hay especialistas que los pueden atender para evitar que los trastornos crezcan.
El psiquiatra Arturo Chavarría Dorantes apuntó que las funciones del cuerpo varían a lo largo de las 24 horas; recordó que a esto se les llama ritmos circadianos y es importante saber su función para la regulación fisiológica.
Dormir bien permite tener un sueño reparador y mantener en equilibrio los sistemas inmunológico, cardiovascular, metabólico y neurológico, expuso.
También detalló que no solo es importante cuánto se duerme sino también cuándo se duerme, pues sí hay patrones de preferencia temporal individual y hay quienes tienen problemas para ajustarse a las imposiciones sociales.
A este grupo de personas les sugiere ver la forma de adaptarse con ayuda de profesionales de la salud.
Otra de las prácticas detectadas en vacaciones es el incremento de personas que atraviesan por la veisalgia, conocida popularmente como “cruda”, la cual los lleva a consumir más alcohol al día siguiente.
En este caso, explican que el consumo excesivo de bebidas alcohólicas deshidrata y disminuye los azúcares que naturalmente tiene el cuerpo, con afectaciones a las funciones visuales, espaciales y cognitivas.
Enfatizan que la cura de esta sintomatología está únicamente en la ingesta de agua y sueros azucarados para tratar la deshidratación y reposición de azúcar.
Con información de: Diario de Xalapa
