El hígado es el órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo. Ayuda al organismo a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas.
Los síntomas de la enfermedad hepática pueden variar, pero a menudo incluyen hinchazón del abdomen y las piernas, tener moretones con facilidad, cambios en el color de las heces y la orina, y piel y ojos amarillentos o ictericia. A veces no hay síntomas. Las pruebas de imagen o de función hepática pueden comprobar si hay daño en el hígado o ayudar a diagnosticar enfermedades del hígado.
Enfermedad hepática alcohólica (eha)
Es causada por el consumo excesivo de alcohol.
México es uno de los países con mayor mortalidad a causa de Enfermedad de Hígado Graso Alcohólico.
Los mexicanos son genéticamente susceptibles a la adicción al alcohol, así como a la aparición temprana de Cirrosis Hepática.
Se ha informado que la edad pico para el inicio de la Cirrosis Hepática en los mexicanos, podría ser de 30 años de edad.
Es la infiltración de grasa en el hígado; cuando esta excede de 5 a 10% del peso del mismo.
Está relacionada con: obesidad, resistencia a la insulina, síndrome metabólico, hipertensión y dislipidemia.
Hasta el 9% de la población mundial la padece.
Su mayor prevalencia se presenta en:
Hombres entre 40 y 60 años de raza hispana.
50% en pacientes con sobrepeso
Hasta 95% en personas con obesidad
70% en diabéticos tipo 2 y 50% en pacientes con dislipidemia.
Se estima que hasta el 26% podría progresar a cirrosis.
En México
Las Enfermedades del Hígado son la 4ª causa de muerte en México.
Más de 100 personas mueren diariamente en México a causa de enfermedades del hígado.
La Cirrosis Alcohólica y no Alcohólica son las principales enfermedades del hígado causantes de muerte en nuestro país, después del cáncer.
A este ritmo se pronostica que para el 2020: 800,730 personas padecerán Cirrosis Alcohólica y 659,854 Cirrosis no Alcohólica.