El Santo Padre les dijo Jesús los llamó por su nombre y que ninguno es cristiano por casualidad
El Papa Francisco tuvo su primer encuentro con los cerca de 500 mil jóvenes que se han dado cita en la Lisboa, Portugal para celebrar la Jornada Mundial de la Juventud.
La cita fue en el Parque Eduardo VII de la capital portuguesa, con un desfile de banderas de todo el mundo, y con cartas escritas por los jóvenes que le leyeron al Papa Francisco, que le fueron entregadas por una religiosa en el altar.
En su mensaje el Papa Francisco inició con palabras de agradecimiento por verlos reunidos, haciéndoles saber que le gusta “el alboroto que hacen” que lo contagian con la alegría de la juventud.
El Santo Padre les dijo Jesús los llamó por su nombre y que ninguno es cristiano por casualidad.
“Has sido llamado por tu nombre, has sido llamado por tu nombre, ninguno de nosotros es cristianos por casualidad. ¡Todos fuimos llamados por nuestros nombres!”.
Francisco pidió a la juventud de estar muy atentos al mundo virtual.
“Quisiera que veas una cosa: muchos hoy saben tu nombre, pero no te llaman por tu nombre. De hecho, tu nombre es conocido, aparece en las redes sociales, se elabora por algoritmos que le asocian gustos y preferencias, pero todo esto no interpela tu unicidad, sino tu utilidad para los estudios de mercado”.
“Cuántos lobos se esconden detrás de sonrisas de falsa bondad, diciendo que saben quién sos, pero que no te quieren; insinúan que creen en ti y te prometen que vas a llegar a ser alguien, para después dejarte solo cuando ya no les interesas más. Y estas son las ilusiones de lo virtual y debemos estar atentos para no dejarnos engañar”
“Él confía en ti, en cada uno de ustedes, en cada uno de nosotros, porque para Jesús cada uno de nosotros le importamos, cada uno de ustedes le importa y ese es Jesús”.
El Santo Padre invitó a los jóvenes a continuar siempre haciéndose preguntas y cuestionamientos.
“También ustedes esta tarde me hicieron preguntas, muchas preguntas. Nunca se cansen de preguntar. Hacer preguntas es bueno, es más, a menudo es mejor que dar respuestas, porque quien pregunta permanece “inquieto” y la inquietud es el mejor remedio para la rutina, a veces una especie de normalidad que anestesia el alma”.
El Papa finalizaría su mensaje a decirles a los jóvenes de no tener miedo y tener siempre coraje para continuar hacia adelante
«Solamente era esto lo que les quería decir: ¡No tengan miedo, tengan coraje vayan adelante, sabiendo que estamos amortizados por el amor que Dios nos tiene!. Dios nos ama, digámoslo todos juntos ¡Dios nos ama! ¡Más fuerte que no oigo!”
Con información de: El Heraldo de México