Según las autoridades, Dorian Piña Hernández fue agredido por delincuentes cuando iba con su familia en Noria de Ángeles
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Zacatecas confirmó el ataque armado a cuatro personas en el municipio de Noria de Ángeles, un hecho de violencia que ha conmocionado a la sociedad, ya que una de las víctimas se trata de un joven seminarista.
Según la información gubernamental, las cuatro víctimas fueron agredidas en la vía pública de la comunidad Ignacio de Zaragoza; producto de las balas, dos personas perdieron la vida, entre ellas José Dorian Piña Hernández, seminarista del tercer año de la etapa de Teología del Seminario Diocesano de Zacatecas.
Además del doble homicidio, donde murió un niño, dos mujeres fueron trasladadas gravemente heridas y luchan por su vida en un hospital.
Previo al ataque armado a las cuatro personas, pobladores de Noria de Ángeles y del municipio vecino de Pánfilo Natera reportaron un enfrentamiento entre integrantes de grupos delictivos antagónicos.
Según las primeras versiones, la familia de Dorian se trasladaba en una camioneta, por lo que el grupo criminal los siguió y empezó a balear.
La diócesis de Zacatecas confirmó el hecho: “Lamentablemente murieron 2 miembros de esta familia, uno de los cuales era seminarista de nuestro Seminario Diocesano. El joven cursaba el tercer año de la etapa de Teología”.
La diócesis elevó una oración para pedir por el eterno descanso de estos hermanos: “Pedimos al buen Dios por sus familiares y por nuestro Seminario Diocesano, formadores y seminaristas.
Que en medio de este clima de tinieblas que padecemos sepamos ser luz de esperanza para los hermanos que sufren”.
El pasado 24 de junio, Sigifredo Noriega, obispo de Zacatecas, reveló que fue interceptado en un retén de hombres armados.
Pocos días después del asesinados de los dos sacerdotes jesuitas en Crocahui, Chihuahua, relató que los hechos ocurrieron el día 22 de ese mes, durante una visita a comunidades de Jalisco, pertenecientes a su diócesis
Más allá de que le hicieron una revisión y lo dejaron ir después de identificarse, el jerarca católico no fue molestado por los sujetos.
Íbamos de Huejuquilla a Tenzompa, me llamó la atención que no era ni Guardia Nacional ni Ejército. Eran de uno de los grupos delictivos, estaban haciendo lo suyo, no dejar pasar a otros grupos. Es la primera vez que me toca en vivo un suceso así”, relató.
El pasado 18 de diciembre, Noriega Barceló dio a conocer que un sacerdote jubilado fue víctima de secuestro virtual, pero luego de la intervención de la Fiscalía de Zacatecas fue llevado a su hogar, sano y salvo.
Familias zacatecanas desplazadas por la violencia en sus comunidades no pudieron celebrar Navidad en sus hogares por miedo a la inseguridad.
Según Imagen Noticias, con Ciro Gómez Leyva, a esta situación se sumaron los municipios de Susticacán y Tepetongo, en donde el miedo a los grupos delictivos ha desplazado a familias enteras.
La comunidad de San Pascual en Tepetongo quedó vacía luego de registrarse enfrentamientos armados y la desaparición de algunos de sus habitantes.
Un ciudadano que solicitó el anonimato relató que no hay horario para que se desate una balacera en los callejones de la localidad, lo que contrasta con la tranquilidad que se vivía en el pasado.
Con el pueblo vacío, en San Pascual no hubo fiestas de fin año; los habitantes de la cabecera municipal pasan estas fechas con el temor constante, como Gabriel Ramírez habitante de Tepetongo quien explica que tienen “angustia” y “miedo”.
Los habitantes denuncian que en estas poblaciones no hay vigilancia policiaca ni del Ejército, testimonios que contrastan con la versión del gobierno, ya que el secretario de Seguridad Pública del Estado, Adolfo Marín, aseguró que hay unidades presentes en todas las áreas de Tepetongo aunque admitió que se presentan casos “lamentables” como el de la balacera.
Con información de: Excelsior