- Afirman que no hay pagos para enero y febrero y tampoco reglas de operación.
Por Luis Manuel Toto Pólito
San Andrés Tuxtla, Ver.-Aún no se han dado a conocer las reglas de operación para el 2019 sobre las estancias infantiles de México, y estas podrían llegar a convertirse en guarderías y erradicar la formación educativa que brindan, señalaron directoras de zona rural y urbana en esta ciudad, quienes resaltaron que el gobierno sigue adeudándoles los pagos de enero y febrero de este mismo año, lo que las hace suponer que podrían perder este recurso destinándolas a un posible cierre en unos meses.
Advirtieron que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha reducido a la mitad el presupuesto para estos lugares de protección infantil, ya que previo a su ingreso se destinaban 4 mil millones de pesos al año para el subsidio del cuidado de los menores, alimentación, educación y garantías de protección con educadoras certificadas.
En la actualidad, las 613 estancias infantiles en Veracruz pudieran quedar pulverizadas a la mitad y la misma reducción se aplicaría a los más de 23 mil niños y a los 5 mil empleos directos que se han creado con el paso de los años.
Las encaradas de algunas estancias infantiles como: Grace Rubi Baltazar, Monica Martínez Domínguez y Maria Guadalupe Consola Gapi, explicaron que el gobierno pagó hasta el año pasado 11 mil pesos anuales por niño inscrito a las estancias de Sedesol, ahora Bienestar, recurso muy por debajo de lo que en comparación se destina a un niño integrado a las Guarderías del Seguro Social y que asciende a 56 mil pesos anuales, mientras que el gobierno federal invierte 76 mil pesos al año por niño que acude a una guardería del Issste.
Además afirmaron que con el cambio de gobierno se prevé que la edad mínima para que los menores puedan tener acceso a este servicio cambie, ya que hasta el momento es posible que los niños de uno hasta 3 años 11 meses, y niños con discapacidad con edades entre 1 año a 5 años 11 meses ingresen, mientras que con las nuevas reglas pudieran disminuir estos rangos para la aceptación de los infantes, quedando entre 1 año hasta 2 años 11 meses la edad mínima para gozar el servicio, lo que convertiría a las estancias infantiles en Guarderías nadamás.
Aseguraron que cuando inició el Programa hace cerca de 12 años, recibían 700 pesos para el subsidio de un menor, después aumentó hasta 950 en el 2018, y en el 2019 se dará un nuevo cambio con la disminución del presupuesto hasta 450 pesos por cada infante, con lo que se erradicará a la mitad de la población protegida en las estancias y se dejará en el abandono a miles de asistentes educativos como Brisa Xalate Pinos, quien dio su testimonio y enfatizó que muchas trabajadoras se quedarán sin el sustento en sus hogares, incluidas madres solteras que luchan diariamente para sacar adelante a sus familias.
Las encargadas de las estancias afianzaron su indignación por este giro, ya que han atravesado una importante profesionalización al grado de certificarlos con el estándar 335 en preescolar a pesar de tener carreras afines a preescolar, esto para continuar como titulares de estancias y poder mantenerlas abiertas.
Lamentaron que las estancias infantiles estén atravesando por esta situación, y pidieron al gobierno de López Obrador revisar expediente por expediente, guardería por guardería y confirmar desde la perspectiva social que estos centros son necesarios y eficientes para que continúen la atención infantil primordialmente de personas de escasos recursos.
Al concluir recordaron que, por no tener reglas de operación, ni una dependencia que las reconozca ellos actualmente trabajan sin seguros de cobertura amplia para los menores, lo que los pone en riesgo en caso de accidentes o lesiones, algo que debiera no ocurrir.