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La Fiscalía llamó a los abogados de Mario Aburto para declarar sobre el alegato de tortura
El asesinato del excandidato presidencial en las elecciones de 1994, Luis Donaldo Colosio, quizás uno de los crímenes más controvertidos en la historia política reciente de México, ha sido reabierto tras 29 años.
Ya que el equipo especial de investigación y litigación en el caso del magnicidio del exaspirante a la silla presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), solicitó esta semana la declaración de los abogados Xavier Alfonso Carvajal Machado y Marco Antonio Mackliz Mercado.
Luis Donaldo Colosio recibió dos balazos el 23 de marzo de 1994, cuando se encontraba en un mitin saludando a la multitud en el barrio popular de Lomas Taurinas en Tijuana, Baja California, presuntamente a manos de Mario Aburto.
Carvajal Machado y Mackliz Mercado, los abogados que fungieron como defensores de Aburto, señalado como el asesino material de Colosio, asistieron miércoles y jueves a las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) en Tijuana para declarar sobre un alegato de tortura a la que argumenta haber sido sometido el acusado en 1994.
Esto debido a que Aburto alegó haber sido torturado para rendir su declaración, por lo que la FGR abrió nuevamente el caso al no prescindir los que tienen que ver con tortura o malos tratos.
Sin embargo, Carbajal Machado dijo extrañarse de haber sido llamado a través de un citatorio por el alegato de tortura que se encuentra dentro de la averiguación previa numero 2080/94 y no en una nueva, por lo que resaltó que no se trata de una nueva diligencia, sino que el caso había sido reabierto.
“Es un citatorio que se encuentra dentro de una averiguación previa que fue formulada en contra de Mario Aburto Martínez el 23 de marzo de 1994 con motivo del asesinato de Colosio, pero no me explico por qué se trata de esta averiguación previa que están reabriendo y no una nueva investigación”.
Igualmente, el abogado Mackliz Mercado se mostró extrañado ante la reapertura del caso, pues dijo que se ha llevado “de una manera muy extraña, porque a como se han estado moviendo las cosas hoy en día en México, esto me deja mucho que desear”.
Refirió que, si bien el citatorio estuvo principalmente sustentado en el alegato de tortura, hay muchas cosas que les tienen que explicar, como “cuáles son los motivos, las causas, los fundamentos que ellos tienen para poder citarnos”, pues a pesar de ser ciudadanos y poder ser citados, querían saber cuál es el fin real de todo ello.
Recordó además que en aquel momento, durante el caso, él recibió una llamada del delegado de la entonces Procuraduría de Baja California para pedirle que fungiera como defensor de Aburto, quien posteriormente lo ratificó.
Al respecto, el litigante Carbajal Machado consideró que por la forma en cómo se ha dado la situación, acusó que se trataría de un distractor por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), “pues con el ánimo de buscar cómo encontrar responsables de gobiernos anteriores, quiere involucrar personas que hayan incidido en ese caso”.
Mientras, para Mackliz Mercado “el caso Colosio ya es un caso cerrado”, pues argumentó que hay los elementos suficientes para declararlo así. Alegó que se detuvo a la persona en flagrancia del delito, que las lesiones que presentaba no fueron causadas en sus interrogatorios y “aquí ni se le presionó ni se le gritó absolutamente nada”.
Y es que hay que recordar que en septiembre del 2022 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) rechazó la petición de Aburto Martínez para que revisaran su sentencia de 45 años tras declararse responsable del magnicidio.
Ya que ninguno de los integrantes de la Sala Superior decidió “hacer suya” la petición para llevarla a discusión a la Sala Superior, así que retornó al primer tribunal colegiado en materia penal, con sede en el Estado de México para que sea resuelto por dichas autoridades.
Con información de: Crónica de Xalapa
