By “Ana Cristina Ledezma no tiene cédula profesional ni experiencia, pero eso sí, muchas ganas”Un improvisado ganoso
Está más que comprobado que el curriculum no hace al funcionario público eficiente. Claro, contar con un nivel académico adecuado es obligado para participar en un equipo de gobierno, pero las capacidades y la experiencia son herramientas indispensables, diríamos imprescindibles, en estas tareas del servicio público.
Y si no, fíjese en este caso: con una licenciatura en Economía por la Universidad Veracruzana, una especialidad en Planificación Económica por la Escuela Central de Planificación y Estadística de la Universidad de Varsovia, una maestría en Desarrollo Regional, por la Universidad Veracruzana, y un doctorado en Finanzas Públicas, también por la UV, don Hilario Barcelata Chávez no sabe qué hacer como director del Instituto de Pensiones del Estado (IPE)
Y es que, como se lo dijeron en la primera reunión que sostuvo con los miembros del Consejo Directivo, no es lo mismo hacer juicios en artículos periodísticos e, incluso, alterar datos, que estar ahí en el lugar de los hechos enfrentando las broncas. Solo les faltó restregar en la cara de don Hilario que los trabajos de “investigación” que publicaba enjuiciando severamente al gobierno anterior se los hacían sus alumnos de la UV donde es profesor de Tiempo Completo Titular “C” y que él se los pirateaba para publicarlos con su crédito.
Este tipo de “chamba” lo catapultó para ocupar la dirección del Instituto de Pensiones del Estado, a la que llegó con la espada desenvainada tildando a todos los trabajadores, una de ellas con más de 30 años de servicio, como duartistas, por lo que no tenían derecho a permanecer más tiempo en sus trabajos; los corrió y se echó encima docenas de demandas laborales que, inevitablemente, tendrá que pagar con fondos del instituto a su cargo; pero, además, contrató a 17 edecanes para su servicio personal, con lo que se echó encima a todos los trabajadores de esa institución que votaron por un cambio y confiaron en la oferta electoral del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, y ahora se arrepienten echando pestes porque consideran que les salió el tiro por la culata.
Y no es para menos, Hilario Barcelata Chávez es de los funcionarios que no ayudan al Gobernador en nada, al contrario, con sus acciones de un revanchismo absurdo contra quienes lo único que han hecho es trabajar e impulsar con su voto un cambio. Por qué no la emprende don Hilario Barcelata en contra de los exdirectores que se aprovecharon del cargo para saquear las arcas del IPE mediante convenios leoninos con muchos medios de comunicación; por qué no da a conocer la lista de jubilados que cobran cien mil pesos o más cada mes y que siguen trabajando para el gobierno; por qué no denuncia a quienes dispusieron de la reserva técnica del instituto, dinero propiedad de los derechohabientes y que suman cuando menos cinco mil millones de pesos. No, porque le vino grande la realidad… Un rotundo fiasco resultó ser el doctor en Finanzas Públicas.
Sedesol y la elección en Veracruz
Antaño, Veracruz ha protagonizado vergonzosos capítulos en los que personajes oscuros intentaron sacar oro molido con los padrones de beneficiarios de los programas sociales.
Para evitar que eso se repita, este viernes, la delegada federal de la Secretaría de Desarrollo Social, Anilú Ingram Vallines, instalará el Comité Preventivo de Blindaje Electoral en el Estado, con lo cual se busca proteger a los beneficiarios de cada uno de los programas diseñados para abatir el rezago y la desigualdad.
Como ya adelantó la funcionaria federal, en este esfuerzo que encabeza Sedesol estarán conjuntadas varias dependencias federales y, por supuesto, la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (Fepade), la cual es la encargada de sancionar a todos aquellos que se quieran pasar de listos con los programas sociales.
Anilú Ingram deja muy en claro que prevenir que los recursos públicos no se utilicen para fines distintos a los establecidos en los programas e inhibir que se incurra en violaciones a las normas penales, administrativas y electorales, son tareas de todos los días y no nada más por el proceso electoral.
Percepción equivocada
Es cierto aquello de que las elecciones municipales son distintas a todas las demás; a una de diputados locales, a las de diputados federales o senadores, a la de gobernador y hasta la de Presidente de México. Y es que un alcalde es la autoridad que se tiene más cerca, a quien se puede acudir en cualquier momento para resolver algo urgente, por eso es que despiertan tanta pasión los procesos electorales municipales.
Y esta que viene se pone más interesante porque ante la situación que impera de falta de credibilidad en los partidos políticos, los ciudadanos van a votar a favor de quien les inspire más confianza, de quien tenga los mejores antecedentes, del mejor candidato aunque sea del partido que sea.
Por eso es que la percepción que se tiene de los sitios que ocupan los principales partidos políticos o las alianzas más fuertes, a la que fortalecen encuestas que se dan a conocer y que coinciden en que tal o cual partido o alianza está mejor posicionada y por eso ganará el mayor número de alcaldías, está completamente equivocada.
Los resultados de los encuestólogos muestran sondeos estatales y nacionales, pero a la hora de la elección en un municipio eso no contará en nada, los vecinos votarán por el mejor candidato y no por el partido que lo apoye, por eso es que resulta impredecible adelantar resultados como se viene haciendo, basados en preferencias electorales generales. Por eso de que habrá sorpresas, las habrá.
Las propiedades del IPE
Los miembros del Consejo Directivo del Instituto de Pensiones del Estado se han venido negando a deshacerse de bienes inmuebles de esa institución, así como de disponer de la reserva técnica que llegó a alcanzar los siete mil millones de pesos. Al final, los bienes han sido invadidos, otros no son rentables y la reserva se la robó Javier Duarte de Ochoa.
Ayer nos enteramos que al menos 15 de los 45 bienes inmuebles que son propiedad del Instituto de Pensiones del Estado (IPE) están invadidos total o parcialmente, lo que suma recursos por más de 135 millones de pesos que tendrán que ser peleados en tribunales. De acuerdo a una solicitud de información, el IPE ha promovido desde hace seis años denuncias penales por despojo, juicios ordinarios civiles y diversos requerimientos extrajudiciales para liberar estos bienes inmuebles, pero hasta el momento siguen sin resolverse.
Hay casos graves donde unidades habitacionales completas se instalaron en predios del IPE, como la Unidad Magueyitos, en Banderilla, que tiene invasiones desde hace varios años en cuatro terrenos con valor de más de 35 millones de pesos, así como las invasiones en la Unidad Sipeh, en Las Ánimas, de varios terrenos, que suman 6 millones 252 mil pesos.
Otra invasión grave son las unidades habitacionales San Marcial y Tlacotenango, en Fortín de las Flores, cuyo valor del terreno alcanza los 23 millones de pesos. El bien invadido con mayor plusvalía para el IPE es el ubicado en Ignacio de la Llave No. 105, en la ciudad de Xalapa, el cual tiene un valor de 35 millones 581 mil pesos, y está parcialmente invadido por el teatro La Libertad, iniciativa del maestro Abraham Oceransky, y sobre el cual ya hay una denuncia de desalojo. Total que, en la actualidad, el IPE tiene bienes inmuebles con un valor de más de 3 mil 500 millones de pesos, de los cuales ya se ha anunciado la venta de al menos 20, que servirá para fortalecer el programa de préstamos con el que se pretende abatir el déficit del instituto. O sea, un paliativo.
Los terrenos invadidos
En Xalapa, los terrenos invadidos son: Ignacio de la Llave No. 105, con valor de 37 millones 581 mil pesos; cuatro terrenos en Sipeh Ánimas, con valor de 6 millones 252 mil pesos; dos terrenos en Buenavista, con valor de 8 millones 252 mil pesos, y cuatro terrenos en Banderilla, con valor de 35 millones 387 mil pesos.
En Coatzacoalcos se encuentra invadido el predio comercio Las Brisas, con valor de 2 millones 653 mil pesos; también, el predio Matagarrapata en Minatitlán, con valor de 21 millones 702 mil pesos. Además, en Fortín de las Flores se encuentra invadido el predio Tlacotenango, con valor de 22 millones de pesos, y la Unidad San Marcial, cuyo valor es de casi 2 millones de pesos…. ¿Sabrán esto los derechohabientes del IPE?
REFLEXIÓN
La Auditoría Superior de la Federación presentó su Informe General de la Cuenta Pública 2015, en el que Veracruz presentó irregularidades por 7 mil 706.6 millones de pesos de un total de 50 mil 989 millones de recursos federales, y “yo veo complicado que el actual gobierno tenga recursos para reintegrar”, afirmó el titular de la dependencia, Juan Manuel Portal Martínez. Es una imprudencia decir esto ¿no? ¡Agarren a Duarte y a toda su pandilla! Escríbanos a mrossete@yahoo.com.mx formatosiete@gmail.com www.formato7.com/columnistas
