Por las altas temperaturas registradas en los últimos 12 meses que batió todos los récords
António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), afirmó que los humanos son una amenaza para el planeta luego de que el mundo batió un récord por presentar más de 12 meses altas temperaturas.
Los humanos representan el mismo «peligro» para el planeta que «el meteorito que exterminó a los dinosaurios», declaró este miércoles 5 de junio el secretario general de la ONU, dijo en su discurso en Nueva York en el que coincidió con varios informes internacionales alarmantes, como son la prohibición de la publicidad del petróleo, el gas y el carbón, principales causas del calentamiento global.
«En el tema del clima, no somos los dinosaurios. Somos el meteorito. No sólo estamos en peligro. Somos el peligro», afirmó António Guterres citado por la agencia AFP durante un largo discurso en Nueva York por el Día Mundial del Medio Ambiente.
Sus palabras acompañan la publicación coordinada de las últimas alertas científicas: mayo de 2024 fue el mes de mayo más cálido jamás registrado en el mundo (en tierra y mar), el doceavo mes consecutivo en batir su propio récord, según el observatorio europeo Copernicus.
Y hay un 80 por ciento de probabilidades de que la temperatura media mundial en un año calendario supere «temporalmente» en más de 1.5 grados centígrados los niveles preindustriales en al menos uno de los próximos cinco años, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
En la última década estamos en aproximadamente 1.2 grados centígrados, según un estudio también publicado el miércoles por decenas de climatólogos reconocidos. La humanidad está, por lo tanto, cerca del límite de 1.5 grados adoptado en el Acuerdo de París de 2015, con una diferencia: esta meta de +1.5 grados debe alcanzarse a lo largo de varias décadas para considerarse como nuestro nuevo clima estabilizado.
Una señal preocupante, sin embargo, es que el año 2023, el más cálido en los anales, terminó con una anomalía de 1.48 grados centígrados en comparación con 1850-1900, según Copernicus, debido al cambio climático y un aumento puntual de calentamiento aportado por el fenómeno natural El Niño.
Algo nunca visto, probablemente desde hace milenios según los climatólogos, que observan la multiplicación e intensificación de olas de calor mortales, sequías e inundaciones devastadoras en todo el mundo.
«Las emisiones mundiales deben disminuir un 9 por ciento anual hasta 2030 para que el límite de 1.5 grados no se supere», recordó António Guterres. Pero el pico no se ha alcanzado oficialmente. Y aunque la humanidad acordó en diciembre en la COP28 en Dubái abandonar gradualmente las energías fósiles, su declive no es inminente.
Con información de: El Heraldo de México