By Debe ser un error del tipo que da el clima… bueno, al menos en mis tiempos, nunca se confiaba en Juan Carlos Iracheta, un tipo sensacional que más llamaba mi atención por las cápsulas científicas y experimentos que realizaba, que por informar cómo iba a estar el clima… pero hoy, los tiempos, tanto tecnológicos como climatológicos, ¡han cambiado!
Por eso, aun cuando digan misa, yo sí creo en Javier Duarte de Ochoa… ¡cuando dice que va a suspender clases! No han de negar que le atina en un alto porcentaje de que el día de se va a fregar… y si no le atina, siempre vale la pena prevenir que lamentar… aunque nunca faltan aquéllos que se “lamentaban” cuando no le atinaba…
Como sea…¡cómo van a extrañar los maestros y los alumnos a Javier! pero no así los padres de familia, que tenían que hacer juegos malabares ante la interrogante que una noche antes, cuando se anunciaba oficialmente la suspensión de clases, se hacían: “Ahora, ¿con quién dejamos a los niños?”
Pero el quid del asunto climático está en que para mí debe ser un error la información que la Comisión Nacional del Agua dio ayer por la tarde, más cuando habla de depresión, tormenta, vientos huracanados, lluvias, ¡provocadas por Javier en el Pacífico!
Sí, debe ser un error, porque desde el pasado 5 de junio hasta nuestros días, haga de cuenta que el mal clima se asentó de este lado del país, precisamente en Veracruz… ¿por el Golfo? Sí, por el Golfo… bueno, no sean mal pensados, me refiero al Golfo de México… porque siendo sinceros, entonces realmente estaríamos hablando de varios Golfos de Veracruz…
Por eso me extraña cuando leo que la está haciendo de tos Javier por el Pacífico… ¿cuál Pacífico? si anda más calientito que garnacha de Rinconada, pero he de confesar que las de Altotonga no se quedan atrás y mucho menos las de Orizaba…
Luego entonces, “Earl”, la tormenta, es un “chipi-chipi” al lado de la lluvia de denuncias que se han prodigado Miguel Ángel Yunes Linares y Javier Duarte de Ochoa, dejando más damnificados que los huracanes Karl y Stan… sí, realmente se “Stan” provocando severos daños, tanto que paradójicamente, con esta lluvia de denuncias y a la vez de mierda que se arrojan, ¡salen a relucir sus trapitos al sol!
Y en serio que es paradójico, porque entre más deslaves de lodo y mierda haya, más casas (no, casa la mía), digo, más residencias y negocios salen a flote… y recuerden que a veces, lo que flota es la caca.
Bueno, pero a lo mejor por eso, porque como flotan, salen las flotillas de residencias, de empresas, de departamentos, de negocios… y también “salen” del Gabinete los funcionarios… como Bermúdez Zurita…
¡No! por favor, no crea que el ex secretario de Seguridad Pública es un damnificado de estos dos huracanes que azotan a Veracruz en las últimas semanas… ya lo hemos dicho, si fuera un río Bermúdez, con todas las riquezas inmobiliarias, empresas y otros que le han exhibido, simplemente diríamos que ¡se pasó de madre! Bueno, quizás la expresión correcta sea “salirse de madre”, que es cuando se pasa el río de su borde…
Lo cierto es que todo ello ha derivado en un auténtico “desmadre”, que es una expresión sinónima de salirse de madre.
Pero en este “desmadre” entre Yunes y Duarte, como ocurre cuando llueve tan copiosamente como en estos últimos días, quien más padece al final de su tormentoso conflicto político-judicial, es Veracruz, que a como va con esta lluvia de lodo y mierda, parece que valdrá ¡sombrilla!
¿Depresión, lluvias, mal tiempo por la tormenta Javier en el Pacífico? ¡Por Dios! ¡Eso no es nada con el del Golfo!
