

En la Cuenca del Papaloapan se han registrado varios casos de derrumbe de árboles de mango, algunos de ellos han caído sobre viviendas, y cableado eléctrico, lo que provoca apagones y genera preocupación entre los habitantes. Las fuertes lluvias que han azotado la zona en los últimos días han debilitado el suelo, sumado a que el árbol de mango no tiene raíces profundas y cuenta con abundante follaje que retiene agua, provoca que aumente su peso y se desplome con facilidad.
Las autoridades señalaron que la humedad del terreno y la intensidad de las precipitaciones crean condiciones de riesgo para estos árboles, sobre todo en áreas pobladas. Ante ello, Protección Civil exhortó a la ciudadanía a revisar los árboles cercanos a sus hogares, podar ramas pesadas y mantenerse alerta durante los días de lluvia intensa.
Finalmente, se pidió a los habitantes colaborar con las medidas preventivas y reportar cualquier situación de peligro para evitar accidentes, protegiendo así la integridad de las familias que viven en zonas vulnerables de la región.
Con información de: Crónica de Xalapa


