Los autos policiales están adaptados cuando llevan elementos K9, sin embargo, el sistema de seguridad falló, informó la Policía
El Departamento de Policía de Houston, en Texas, se encuentra de luto tras la muerte de uno de los perros que formaba parte de su división canina; de acuerdo con un comunicado de la dependencia, el can Aron, de cuatro años, falleció de agotamiento por calor tras haber quedado encerrado dentro de una patrulla.
Las autoridades dijeron que se trató de un trágico accidente, pues en realidad al can lo habían dejado el pasado lunes 12 de junio dentro del vehículo oficial con el aire acondicionado encendido, sin embargo, el motor falló y se apagó, a la par de que creen que el sistema de seguridad secundario de la patrulla también falló.
Cuando el policía a cargo regresó al auto, notó que éste estaba apagado y que Aron se encontraba en peligro, por lo que notificó de inmediato la situación. El perro policía fue llevado a una clínica veterinaria cercana y aunque se le dio la atención de emergencia, finalmente murió debido al agotamiento por calor.
Cuestionados sobre los motivos por los que el can se había quedado en la patrulla, los uniformados detallaron que es una práctica necesaria en campo, ya que los perros no siempre participan activamente en el trabajo.
Es importante mencionar que estos carros están adaptados para que los K9 se queden dentro, ya que cuentan con un sistema que notifica al conductor si se llega a apagar, además de hace sonar el claxón, activa los ventiladores de enfriamiento y baja los vidrios de la ventana.
«En este caso no sucedió (…) Por favor, tengan en sus oraciones al cuidador de Aron y a todo el equipo K9 mientras lloran su pérdida», dijo la Policía de Houston.
El pasado lunes, el Servicio Meteorológico de Estados Unidos advirtió desde temprano que la ciudad texana de Houston podría alcanzar los 90 grados Fahreheit (más de 32 Celsius), por lo que le spidió tomar previsiones debido a la ola de calor. De acuerdo con el registro de Tiempo3, ese día las temperaturas superaron los 40 grados. Ese mismo día fue cuando Aron se quedó encerrado las temperaturas eran superiores al pronóstico inicial, lo cual le generó complicaciones a la salud,.
De acuerdo con expertos, si se detecta que un perro fue víctima de la ola de calor, lo importante es llevarlo a un lugar fresco y sombreado, refrescarlo con agua y también ofrecérsela para que beba, además de contactar inmediatamente a un veterinario.
Con información de: El Heraldo de México