Mauricio Mendoza alias «Chinga» o «Z», empleaba violencia extrema en sus víctimas que era ofrecidas en sacrificio
Mauricio Mendoza es conocido como“Chinga” o “Z”, y hasta antes de diciembre de 2022, era un asesino y traficante de drogas que se dedicaba a delinquir en Colombia; sin embargo, el presunto criminal fue capturado el 20 del mismo mes en el municipio de Cartago en Valle de Cauca. El capo era identificado por utilizar métodos sangrientos para torturar y matar a sus víctimas.
De acuerdo con medios locales, el “Chinga” operaba de manera “escalofriante” cuando capturaba a algunas de sus víctimas ya que luego de torturarlas al mantenerlas sentadas en una silla, terminaba por desmembrarlas para después hacer un ritual con las extremidades en honor a la Santa Muerte.
“Chinga” fue capturado durante un operativo realizado en una vivienda ubicada en la calle 10 con carrera 14 en el barrio Carlos Holmes en el municipio de Cartago. El capo era buscado por las autoridades tras una orden emitida en el Juzgado Promiscuo Municipal de Obando en Valle del Cauca, por los delitos de Concierto para delinquir agravado, con fines de homicidio y tráfico, además de la fabricación o porte de armas de fuego o municiones bélicas, según información de Canal 1.
Mauricio Mendoza constantemente cambiaba su aspecto físico para evitar que fuera arrestado, ya que era un objetivo prioritario para la policía pues mantenía aterrorizada a la población de Valle del Cauca. “Se tiene información que esta persona empleaba violencia extrema contra sus víctimas mediante la utilización de sillas de tortura y posteriormente los desmembraba.
Alias ‘Chinga’ o ‘Z’ había cambiado su apariencia para no ser detectado por las autoridades. Con esta captura se esclarecen más de nueve homicidios y el capturado fue dejado a disposición de autoridad competente”, indicó la policía.
El criminal formaba parte de las filas del grupo de la delincuencia organizada identificado como “Los Flacos”. Aunque es señalado de cometer los delitos señalados, el narco era buscado principalmente por un asesinato ocurrido en 2020.
Además, como sicario trabajó en el grupo narco “Nueva Alianza”, el “Z” hasta su desintegración cuando se cobijó en la banda de “Los Flacos”. Durante el operativo donde fue arrestado, la policía encontró varias imágenes relacionadas con la muerte, las cuales empleaba cuando ofrecía a sus víctimas en el momento de torturarlas.
El coronel Yovanni Gómez, comandante del Departamento de Policía Valle del Cauca, confirmó que “Chinga” desmembraba a sus víctima para sus rituales: “Fungía como integrante de la estructura criminal ‘Los Flacos’ y se encontraba reseñado en el cártel de los más buscados del Valle del Cauca.
Tenía una trayectoria criminal de más de 7 años, se tiene información que esta persona empleaba violencia extrema contra sus víctimas; mediante la utilización de sillas de tortura, a quien posteriormente los desmembraba”.
Con información de: El Heraldo de México