- Factores económicos, desinterés de los padres de familia e hijos, contribuyen a bajo rendimiento escolar.
Sulamita Pólito Marcial |
Por Sulamita Pólito Marcial |
Situación económica, desinterés de los padres de familia y rebeldía de los propios hijos, son factores que contribuyen a que jóvenes estudiantes acudan a la escuela sin desayunar, afectando así, su aprendizaje.
Aunado a lo anterior, el uso excesivo de los aparatos tecnológicos como los celulares, ocasionan que los estudiantes no se alimenten en tiempo y forma, lo que conlleva a un bajo rendimiento escolar.
Ante tales situaciones el psicólogo y docente de la escuela secundaria y bachilleres, “Isaac Ochoterena ” ( ESBIO) en San Andrés Tuxtla, Jorge Alberto Pucheta Chontal comentó que actualmente entre los jóvenes se da mucho la dependencia de dichos aparatos que los absorbe por varias horas al día, en complicidad de los propios padres ya que ellos permiten tales actos en sus hijos.
De acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) sobre el bienestar de los estudiantes del Programa Internacional de Evaluación de los Alumnos (PISA) revela que el 21% de los adolescentes de 15 años en México, no desayunan antes de ir a la escuela.
Mientras que según estudios realizados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, se tiene el dato que en el 2012 y 2015 el porcentaje de estudiantes de 15 años que declararon utilizar smartphones en aulas y en el hogar, en un 22% en México.
Por lo que el director de la misma, José Paxtian Fiscal dijo los padres de familia argumentan que sus hijos deben traer celulares, ya que existe la necesidad de tener constante comunicación con ellos, pero que muchas veces los alumnos lo usan en horarios de clases, entorpeciendo de esa manera su aprendizaje.
El docente Andrés Moreno Nájera comentó que los jóvenes por su rebeldía no se desayunan antes de acudir a clases, en tanto, el uso de los celulares cada día se hace mayor y los docentes también les causa problemas ya que son quienes evitan el uso de tales herramientas, pero que en ocasiones tales actos causan molestia en los padres.
Los entrevistados coincidieron en que hace falta de cultura entre la población estudiantil, proviene del hogar, ya que aunque como docentes tratan de limitar el uso de los celulares en el salón de clases, los padres permiten esos actos incorrectos en sus hijos, lo que contribuye a que no se tenga un control adecuado en el uso de tales aparatos tecnológicos en los planteles educativos.