
La nueva fiscal de Veracruz, Lisbeth Jiménez, promete imparcialidad, cero impunidad, abatir rezago y atender casos de violencia vicaria.

Tras asumir formalmente la titularidad de la Fiscalía General del Estado, la nueva fiscal de Veracruz, Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, aseguró que su gestión estará marcada por la imparcialidad, sin intereses políticos y con un combate frontal a la impunidad, al advertir que las investigaciones se conducirán “sin filias ni fobias”.
En su primera entrevista luego de rendir protesta ante el Congreso local, la titular de la Fiscalía General del Estado explicó que su plan de acción estará enfocado en reducir el amplio rezago de audiencias y carpetas de investigación, fortalecer los procesos en casos de violencia contra mujeres, incluida la violencia vicaria, así como agilizar las terminaciones anticipadas dentro del sistema penal acusatorio.
Jiménez Aguirre subrayó que, como cualquier otro servidor público, también será evaluada y deberá presentar su examen de control y confianza ya en funciones, como parte de los requisitos legales de permanencia en el cargo.
Al concluir la sesión del Congreso donde rindió protesta, la nueva fiscal destacó que su principal directriz será responder a las víctimas.
“Trabajo, muchísimo trabajo. Lo que necesitamos es que las víctimas obtengan reparación”, expresó al referirse a los primeros desafíos al frente del organismo.
La nueva fiscal de Veracruz reconoció que una de las mayores urgencias institucionales es actualizar miles de audiencias atrasadas y revisar el estado general de las causas penales.
“Lo más importante es poner al día los procedimientos. Son muchísimas audiencias y muchísimas carpetas rezagadas”, declaró.
Detalló que ya cuenta con un diagnóstico preliminar de la situación que guarda la Fiscalía y que mantendrá comunicación directa con víctimas y colectivos.
“Siempre he sido de puertas abiertas. Así trabajé en el Tribunal: atendiendo a colectivos, a familias de víctimas de feminicidio, a grupos de la diversidad. Conozco las problemáticas y las demandas que hay”, sostuvo.
Dentro de su agenda prioritaria, reiteró que la violencia vicaria será uno de los ejes centrales.
“Durante tres años he tenido contacto con estos casos y sé perfectamente lo que está pidiendo la sociedad. Todo eso será atendido”, afirmó.
En el plano operativo, Jiménez Aguirre adelantó que enfocará esfuerzos en concluir los procesos que ya se encuentran en etapa de juicio, especialmente aquellos donde las personas ya están vinculadas a proceso y siguen sin sentencia.
“Tenemos que realizar esas audiencias”, puntualizó.
Además, informó que utilizará los mecanismos del sistema penal acusatorio para resolver asuntos que no requieren juicio oral, con el objetivo de concentrar los recursos institucionales en delitos graves como secuestro, feminicidio y homicidio.
“Hay múltiples salidas alternas pendientes. Vamos a utilizarlas para desahogar expedientes”, explicó.
Sobre su relación con el Ejecutivo, recalcó que la Fiscalía mantiene su autonomía por mandato legal, aunque la coordinación con los tres niveles de gobierno será indispensable. Señaló que con la gobernadora Rocío Nahle existe una relación institucional respetuosa desde su paso por el Poder Judicial.
Cuestionada sobre posibles investigaciones selectivas, fue enfática al negar cualquier influencia partidista.
“No habrá objetivos políticos, pero tampoco tolerancia a la impunidad. Se aplicará la ley sin sesgos”, afirmó.
Finalmente, aclaró los rumores sobre la duración de su encargo.
“El periodo del fiscal es de cuatro años. Yo solicité una licencia por un año porque así lo establece la ley orgánica”, precisó. Respecto a la posibilidad de ser evaluada al término de ese periodo, sostuvo que la supervisión del servicio público es constante. “El trabajo de cualquier funcionario es evaluable en todo momento. Siempre he estado dispuesta a ser revisada”, finalizó.
Con información de: E-consulta Veracruz


