Al menos dos parejas de la comunidad LGBT en Veracruz están buscando adoptar niños desde hace aproximadamente un año y medio y no lo han conseguido, afirmó Guillermo Izacur Maldonado, el presidente de Jarochos LGBT.
En conferencia de prensa señaló que para las personas heterosexuales es «muy difícil» poder acceder a las adopciones, pero para homosexuales la complicación es mayor por los obstáculos que ponen en el DIF estatal.
Los funcionarios exigen que los interesados «no tengan VIH, que tengan buena estabilidad social, que tengan propiedades, que tengan un buen trabajo los dos y ya cuando tenemos todos los requisitos completos nos botan otra cosa».
El procedimiento es iniciado después de que se obtiene un amparo del Poder Judicial, porque al intentar hacerlo sin ese recurso de entrada hay una negativa por parte de la autoridad, subrayó el activista.
Consideró que el fondo es un tema de discriminación por sus preferencias sexuales, sin embargo, es algo que no se dice tal cual, por lo que se recurre a esas trabas para impedir que se concrete el proceso de adopción.
Señaló que además se enfrentan al rechazo de un sector de la sociedad que por ideología se oponen a que personas gay adopten porque para ellos no es algo que vaya acorde al modelo de familia tradicional.
También existen estigmas en torno a que un menor corre riesgo de ser abusado sexualmente al tener como tutor a un homosexual, algo que se sabe ocurre con mayor frecuencia con heterosexuales, puntualizó.
Recordó el caso de éxito de un activista de la comunidad LGBT en la ciudad de Xalapa quien consiguió hace varios años adoptar a un niño que hoy lleva una vida normal, de protección y educación.
Con informació de: Xeu