

Tres semanas después de las lluvias torrenciales que provocaron inundaciones y deslizamientos de tierra en cinco estados del país, continúa la necesidad de apoyo para quienes resultaron afectados. Entre ellos, las personas con discapacidad que perdieron medicamentos, sillas de ruedas y otros artículos requeridos para su asistencia.
“La situación ha sido extrema. Para toda la población fue algo muy fuerte, pero a las personas con discapacidad les afectó mucho más, porque la movilidad limitada les dificulta llegar a los puntos donde se reparte la ayuda“, explica Fabiola Preza, quien voluntariamente ha trabajado en la distribución de donativos para esta población.
Fabiola es habitante de Poza Rica, uno de los municipios veracruzanos que resultó más afectado, lo que le permitió llegar con menos dificultad a algunas de las colonias que quedaron bajo agua y lodo. Al ser madre de una niña con autismo, se preocupó por la situación particular de vulnerabilidad de quienes viven con discapacidad, y en colaboración con otras familias se organizó para apoyarles.
“Por medio de una asociación de personas con discapacidad que trabaja a nivel nacional levantamos un censo; hemos batallado mucho, porque hubo comunidades que quedaron incomunicadas y sabemos que no hemos llegado a todos los que requieren apoyo, pero hasta ahora hemos ayudado a más de 200”, detalla.
Tras las lluvias ocurridas a mediados de octubre pasado, la Secretaría del Bienestar censó 26 mil 311 viviendas afectadas en 58 municipios del país para brindarles apoyo: 17 mil 120 en Veracruz, 4 mil 796 en Puebla, 2 mil 493 en San Luis Potosí, mil 221 en Hidalgo y 681 en Querétaro; sin embargo, se desconoce la cifra oficial de personas con discapacidad damnificadas.
“Persiste la situación de necesidad porque lo perdieron todo”
Preza señala que han acudido organizaciones e instituciones para entregar donativos, pero “persiste la situación de necesidad porque las personas lo perdieron todo“, y en el caso de quienes viven con discapacidad les hacen falta desde productos de limpieza, alimentos poliméricos, pañales, bolsas y sondas para realizarse diálisis, sillas de ruedas, medicamentos, así como otros enseres.
“Yo creo que ahora es cuando más se siente la necesidad, porque además de los daños en sus casas hay contaminación por los drenajes colapsados, animales muertos y el agua estancada que les afecta por su condición de salud. La ayuda ha sido insuficiente“, lamenta.
La asociación Conciencia Autismo ha juntado donativos especialmente pensados para esta población, que Fabiola y otras madres y padres de familia llevan hasta las colonias afectadas en colaboración con el Club Rotario Poza Rica.
“El Club Rotario se enfoca mucho en la población vulnerable. Nos dieron colchones, han regalado despensas y son parte de nuestra comunidad porque nos apoyan en el área deportiva. No han parado con el transporte para llegar a varios lugares para cubrir con las necesidades de las personas con discapacidad que están viviendo al día”, agrega Preza.
El Club Rotario continúa recibiendo y distribuyendo donativos, por lo que las personas interesadas en ayudar a los damnificados pueden contactarlos a través de redes sociales, en el correo electrónico rotarypozarica@gmail.com o dejar sus contribuciones en la Avenida Uno No. 701 A, colonia Cazones, en el municipio de Poza Rica.
También se pueden dirigir directamente con Fabiola Preza, en Ignacio Zaragoza No. 1, colonia Tepeyac, en el mismo municipio.
El esfuerzo de la Red de Apoyo Humanitario a la Discapacidad para llegar a más municipios
Además del esfuerzo de Conciencia Autismo Poza Rica, otros colectivos, como la Alianza SIMA —siglas de Sororidad, Inclusión, Mujeres en Acción—, se coordinan para llevar apoyo a las personas con discapacidad habitantes de otros municipios con afectaciones.
Alicia Loza, arquitecta especializada en accesibilidad e integrante de Alianza SIMA, comenta que su labor en apoyo de personas con discapacidad y adultos mayores damnificadas comenzó en 2023, cuando el huracán Otis devastó distintos municipios del estado de Guerrero. Ahora, aprovechando esa experiencia, ampliaron su red de distribución a otros estados.
“Somos una colectiva de mujeres que vivimos o tenemos relación con la discapacidad que luego de Otis formamos la Red de Apoyo Humanitario a la Discapacidad, que esta vez se activó para Veracruz y Puebla, donde esperamos participar en la mesa de trabajo para la reconstrucción”, plantea la arquitecta.
La red ha ubicado hogares que tienen algún integrante que vive con discapacidad a través de un sistema de registro virtual, con el que les han apoyado otros habitantes de las comunidades, así como maestros y trabajadores de centros de atención para la salud.
Esta red trabaja en colaboración con Fabiola Preza, y para las personas que resultaron afectadas en Puebla, con Margarita Islas, a quien se pueden hacer llegar donativos en la dirección Ramos Millán No. 16, colonia El Potro, municipio de Huauchinango, donde continúa recabando apoyos para la población con discapacidad.
Con información de: Crónica de Xalapa


