
Una empacadora de cítricos en Cuittláhuac propiedad del síndico electo, Rafael Hernández Cancino, fue incendiada tras un presunto atentado.

Lo que inicialmente se reportó como un incendio accidental ha tomado un giro criminal. La mañana de este viernes, la empacadora citrícola “Zongolica”, propiedad del síndico electo de Cuitláhuac, Rafael Hernández Cancino, fue blanco de un presunto atentado que la redujo a cenizas. El hallazgo de bombas molotov en el lugar de los hechos ha encendido las alarmas sobre la seguridad de los futuros funcionarios municipales en la región de las Altas Montañas.
El incidente se registró en el kilómetro 24 de la carretera federal Córdoba-Veracruz, a la altura de la comunidad Paso Carretas, en Cuitláhuac, Veracruz. Vecinos de la zona alertaron a las autoridades tras observar una densa columna de humo negro que emanaba de la instalación. En cuestión de minutos, el fuego se propagó con una velocidad inusual por las áreas de almacenamiento y maquinaria, alcanzando incluso un camión de carga tipo torton que terminó calcinado.
La magnitud del incendio obligó a la intervención inmediata del Cuerpo de Bomberos de Cuitláhuac, quienes lucharon por horas para contener las llamas. Ante la peligrosidad del evento, efectivos del Ejército Mexicano aplicaron el Plan DN-III-E para coadyuvar en las labores de auxilio, mientras elementos de la Policía Municipal acordonaban el perímetro.
Sin embargo, la sorpresa llegó durante las labores de inspección y enfriamiento. En el exterior del inmueble fueron localizadas botellas con mecheros y residuos de combustible, identificadas como bombas Molotov. Este hallazgo refuerza la hipótesis de que el incendio no fue producto de una falla eléctrica, sino de un ataque provocado deliberadamente para destruir el patrimonio del político veracruzano.
Pese a la violencia del suceso, no se reportaron víctimas mortales ni lesionados, pero las pérdidas materiales son totales. La destrucción de esta planta es un golpe severo a la economía de Cuitláhuac, ya que la empacadora era una pieza clave para el acopio de cítricos destinados a mercados nacionales y extranjeros.
Rafael Hernández Cancino, quien ya compitió por la alcaldía en 2020, se prepara para asumir la sindicatura en la administración entrante de Angélica Peña Martínez. Este ataque ocurre en un contexto de transición gubernamental, lo que añade una capa de tensión política al caso.
La zona permanece bajo estricto resguardo de las autoridades federales y estatales, mientras la Fiscalía General del Estado inicia las investigaciones para identificar a los responsables de este atentado que ha conmocionado al sector agrícola y político de Veracruz.
Con información de: E-consulta Veracruz


