¿Ustedes no quieren a Veracruz?: Medio en broma, medio en serio, interrogo a Víctor Murguía y Manuel Rosete cuando encartan en la sucesión gubernamental para este 2016 junto a Héctor y Pepe Yunes al diputado electo por Acayucan, Erick Lagos. Esto, en el programa de RTV, Revisiones, del pasado martes.
Abogan que los 70 mil votos que logró en la pasada contienda electoral le dan ese derecho de picaporte para encartarlo. Yo lo dudo.
No obstante, digo y sostengo que si quieren hacer candidato a Erick, lo hagan en el 2018, siempre y cuando el PRI gane las elecciones en 2016 y el gobernador electo trabaje para el proyecto de Lagos Hernández.
II
Hay quienes dicen que Erick Lagos Hernández se apuntala para ser el jefe de bancada de la fracción jarocha en San Lázaro. ¿Por qué? El mismo argumento. Sus 70 mil votos en la pasada contienda electoral.
Tal argumento lo vuelvo a rebatir bajo una simple tesis: ser el más popular no implica ser el más preparado.
Se dice que quien lleva la batuta para designar al jefe de bancada jarocha en el Congreso de la Unión es el Gobernador, luego entonces, quien pretende encaminar a Lagos a tal nominación es Duarte de Ochoa.
No lo dudaría. Javier se ha caracterizado por ser un hombre que gusta de ayudar a sus amigos. Por ello, no nos debe extrañar que en las próximas elecciones para diputados locales tengamos por allí a Vicente Benítez y a Juan Manuel del Castillo como candidatos de los Tuxtlas y Córdoba respectivamente… ¡vamos! está demostrado que sabe ser buen amigo.
III
En fin, sea como Jefe de Bancada o precandidato a Gobernador, pareciera que Erick Lagos está empeñado en vender o recuperar sus 70 mil votos a como dé lugar y qué mejor que siendo apoyado por su amigo, el Gobernador Javier Duarte de Ochoa, que lejos de ver por los intereses de Veracruz (en caso de que su apuesta sea Erick Lagos), ve más por los intereses de un amigo y si tuviera algo de político y menos de grilla esta táctica, diría que también los intereses del mandatario estatal… y en una de ésas, del ex mandatario.
Como sea, si Javier Duarte de Ochoa impulsa a su amigo Erick Lagos a cualquiera o a las dos pretensiones, simplemente se estaría viendo de qué está hecho el Gobernador y de qué tamaño es el Gobernador y bien cabría entonces hacerle la misma pregunta pero ya en serio, que le hice a Manuel Rosete y a Víctor Murguía: ¿Usted no quiere a Veracruz?