En el último año, los casos de viruela del mono (mpox) en África han tenido un incremento de más del 500 por ciento.
Desde enero de 2024, África ha registrado 50 mil 840 casos de viruela del mono (mpox), conocida también como viruela del mono, en 19 países del continente, con 10 mil 741 contagios confirmados y mil 83 muertes, según la agencia de salud pública de la Unión Africana (UA).
El director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (CDC de África), Jean Kaseya, subrayó la necesidad de apoyo financiero y medidas efectivas para contener el creciente brote.
La mpox, que causa síntomas como fiebre, erupciones dolorosas, inflamación de ganglios y fatiga, se ha declarado emergencia de salud pública en África por su rápida expansión y alta letalidad en algunos países. La situación se ha agravado con la aparición de una nueva variante, el clado Ib, que ha sido detectada fuera del continente, en Suecia, en un viajero proveniente de África.
La última semana evidenció un incremento alarmante con 2 mil 532 nuevos casos reportados, de los cuales 345 fueron confirmados, además de 32 fallecimientos. Comparado con 2023, los contagios han aumentado un 545%, siendo la República Democrática del Congo (RDC) y Burundi los países más afectados, con el 86.7 por ciento de los nuevos casos.
En estos territorios, los menores de 15 años son particularmente vulnerables, representando más del 65 por ciento de los contagios en la RDC y cerca del 50 por ciento en Burundi, Liberia y la República Centroafricana.
Ruanda y la RDC han iniciado campañas de vacunación, mientras que Nigeria planea comenzar el 18 de noviembre tras superar obstáculos logísticos. La UA también distribuirá vacunas en países como Kenia, Uganda, Costa de Marfil, Liberia y Sudáfrica.
El apoyo de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) ha sido crucial, así como la colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS), que declaró alerta sanitaria internacional para intensificar los esfuerzos de prevención global.
El llamado de Kaseya a un apoyo continuo por parte de la comunidad internacional refleja la urgencia de fortalecer la respuesta sanitaria ante la expansión de la mpox y sus implicaciones globales.
En 2024, la viruela del mono o mpox ha representado una emergencia sanitaria crítica en África. La rápida propagación ha causado preocupación global, motivando respuestas urgentes de salud pública.
El director de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de África (CDC de África), Jean Kaseya, ha enfatizado la necesidad de un mayor apoyo financiero y logístico para mitigar la crisis. El aumento de casos es alarmante, con un incremento del 545 por ciento respecto al año anterior, siendo la República Democrática del Congo (RDC) y Burundi los más afectados. En estos países, los menores de 15 años representan una gran parte de los infectados, con tasas superiores al 65 por ciento en la RDC.
La mpox, caracterizada por erupciones dolorosas, fiebre y otros síntomas, puede ser grave, causando complicaciones e incluso la muerte. Para contener la enfermedad, Ruanda y la RDC han lanzado campañas de vacunación. Nigeria también planea iniciar esfuerzos de inmunización en noviembre tras superar retrasos logísticos.
La Unión Africana distribuirá vacunas adicionales en naciones como Kenia, Liberia y Sudáfrica, en coordinación con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros organismos.
El apoyo internacional, en particular de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), ha sido esencial. Las organizaciones instan a que esta colaboración continúe para evitar la expansión mundial de la mpox y proteger a las poblaciones más vulnerables.
Con información de: Excelsior