- Regresa el Arroz a la Tumbada al día de cierre de esta tradicional celebración alvaradeña.
Con el objetivo de mantener vivas las tradiciones de Alvarado, este lunes se dio a conocer el programa de actividades que se efectuaran en el municipio con motivo de la tradicional celebración de las “Cruces de mayo”, mismo que fue presentado por la directora de educación del H. Ayuntamiento, Nohemí González Lara; el director de la Casa de la Cultura “Narciso Serradel Sevilla”, José Enrique Ruiz Uscanga y el cronista de la ciudad, Luis Fernando Martínez Sedano.
La maestra Nohemí González Lara señaló que a partir del jueves 3 de mayo arranca la celebración de las Cruces y que el día de gala en que Alvarado se viste de blanco es el domingo 27 de mayo, cuando hay folklor, tradición, son, arpa y sobre todo porque este año regresa a formar parte de estas festividades el tradicional Arroz a la Tumbada más grande del mundo.
Por su parte el maestro José Enrique Ruiz Uscanga, dio a conocer que la celebración (misma que celebra su trigésima novena edición), gira en torno a seis foros que son el litúrgico, académico, folklórico, musical, pictórico y gastronómico, además de dar a conocer algunas de las principales actividades que tendrán lugar durante estas festividades.
El jueves 3 de mayo habrá la bendición de cruces y verbena popular con grupos de huapango de la Casa del Cultura; el domingo 13 se presentan los ballets folklóricos “Atlizintla” y “Alvarado”; el sábado 19 se inaugura la muestra pictórica en la Casa de la Cultura; el domingo 20 destaca la participación del ballet folklórico de la Casa de la Cultura Agustín Lara de Tlacotalpan; el miércoles 23 inicia la séptima Feria del Libro; el viernes 25 se presenta en la parroquia de “Nuestra Señora del Rosario”, la Orquesta Filarmónica de Córdoba y Orizaba y el domingo 27 se culmina con la procesión de la siete cruces, el tradicional Arroz a la Tumbada y todo un programa de actividades culturales y litúrgicas, por mencionar algunas actividades.
Finalmente el cronista de la cuidad, Luis Fernando Martínez Sedano, señaló que esta tradición se remonta a la época de la conquista de los españoles, cuando cada tres de mayo se celebraba la parada de la Santa Cruz, ceremonia en que se adornaba y se rezaba acompañada de una procesión, para después derivar en otras actividades festivas, propias de la forma de ser de los alvaradeños y por lo cual se busca mantener viva esta tradición.