By Como para volver a agarrar de pendejos a los veracruzanos, el candidato a gobernador del PAN (con el PRD y MC en calidad de rémoras), Miguel Ángel Yunes Márquez, el mismo que en enero pasado dijo que era de ‘ingenuos’ pensar que en un año se podía acabar con la inseguridad en la entidad, al referirse a quienes le creyeron a su padre su promesa de hacerlo en seis meses, hoy ha salido a la palestra con una propuesta de combate a la violencia criminal y la inseguridad en Veracruz que parece una burla a los veracruzanos, en parte, por copiar lo propuesto por su padre pero, sobre todo, porque luego de postular la municipalización de los cuerpos de seguridad pública, hoy viene con el cuento de que creará una policía estatal unificada.
Su padre, hoy gobernador de un estado que ha escalado sus índices de violencia e inseguridad como nunca antes en su historia, se comprometió en abril de 2016, en campaña por Coatzacoalcos, a recuperar en seis meses la seguridad para los veracruzanos.
Como parte de su decálogo para enfrentar la emergencia en materia de seguridad, se comprometió a crear una nueva Policía Estatal, cuyos elementos serían capacitados y sometidos permanentemente a exámenes de control de confianza, además de ser bien remunerados, con seguridad social y sistemas de protección para sus hijos.
Lo que ha hecho su experto de la SSP, Jaime Téllez Marié, alias Lagrimitas, ha sido despedir a cientos de elementos policiacos, sin que los haya sustituido con personal nuevo y capacitado. Para colmo, como sucedió luego de la masacre de policías en La Toma, las familias de los elementos caídos en cumplimiento de su deber han sido olvidadas y despreciadas.
También se comprometió a dar de baja a los altos mandos de la policía vinculados con la delincuencia organizada y blofeó al decir que no le temía al crimen y que recuperaría la seguridad porque tenía la experiencia suficiente para lograrlo y la mano dura para actuar en contra de los delincuentes. Nada ha cumplido, tan metido en el tema de amedrentar a sus adversarios políticos con la policía estatal, cuyo secretario ha pactado con criminales so pretexto de obtener información.
En la reunión con empresarios en Coatzacoalcos hace exactamente dos años, Yunes Linares también se comprometió a designar como secretario de Seguridad Pública a un militar de alto rango, previa consulta con los secretarios de Gobernación y de la Defensa Nacional.
Dijo que usaría satélites, drones y sistemas de video para combatir a los delincuentes, y hubo una frase cuyo cumplimiento hoy no hay forma de comprobar: “Se vigilará a los delincuentes y no a los ciudadanos”. Todos sabemos que a cada homicidio, secuestro o ejecución extrajudicial, ha salido a revelar el archivo completo de las víctimas, sin que diga nada de los delincuentes, además de usar a la policía para perseguir y amedrentar a los simpatizantes de partidos distintos a los que utiliza para perpetuarse en el poder a través de su familia.
¿Yunes Márquez quiere volver a engañarnos?
Aunque ha sido menos demagogo que su padre, y este lunes dijo que evitará hacer ocurrencias y propuestas incumplibles durante su campaña (contra lo que sí hizo el actual gobernador hace dos años), Miguel Ángel Yunes Márquez presentó sus propuestas para acabar con la inseguridad “en los próximos seis años” (ya no la desmesura de prometer que eso ocurriría en seis meses): «Mi prioridad como Gobernador del Estado será que en los próximos seis años, nuestras familias puedan caminar tranquilas por las calles, los jóvenes tengan espacios de sano desarrollo y nuestros niños puedan tener una infancia en paz, que podamos vivir tranquilos y sentirnos seguros”.
Luego de hablar de los años de Fidel Herrera y Javier Duarte, cuando hubo colusión de los altos mandos policiacos con la delincuencia y se desaparecieron más de mil 500 millones de pesos destinados a combatir la inseguridad, aseguró que en los últimos 17 meses –los de su padre como gobernador– la situación empezó a cambiar.
¿Qué hará ChiquiYunes, como le gusta que le digan, para lograr el milagro que no pudo operar su padre, sedicente experto en seguridad y mano dura para enfrentar a los delincuentes? Estableciendo cuatro grandes ejes a su estrategia contra la inseguridad.
1.- Garantizar la seguridad en lo inmediato, con la presencia del Ejército y la Marina, junto a la Policía Federal y la Gendarmería Nacional en el Estado, para que continúen apoyando en la tarea de seguridad pública.
2.- Implementar una profunda reforma policial, con la creación de la Nueva Policía Veracruzana, que unificará las corporaciones de seguridad, estatales y municipales, bajo un mando único.
3.- Priorizar las labores de inteligencia, modernizando la infraestructura y tecnología para la prevención y el combate a la delincuencia.
4.- Consolidar, a través de acciones y programas, la cultura de la prevención del delito con la más amplia participación ciudadana.
Además, dijo, destinará mil millones de pesos más a la Secretaría de Seguridad para consolidar la Nueva Policía Veracruzana (no se sabe si cada año o solo al principio de la estrategia), se recuperarán los espacios deportivos, culturales y de esparcimiento, en conjunto con los ayuntamientos; y se convocará a los mejores expertos nacionales e internacionales para diseñar nuevas estrategias de seguridad.
Parece que quiere copiar a Marcelo Ebrard, quien estando al frente del gobierno del Distrito Federal aplicó la política de Cero Tolerancia, bajo la supervisión de su creador, el exalcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, a quien el candidato panista estaría pensando en invitar a Veracruz.
La creación de una policía única va, por cierto, contra las posturas demagógicas asumidas durante su segundo periodo al frente del ayuntamiento de Boca del Río y, sobre todo, de cuando la emprendieron para desestabilizar los últimos días del anterior gobierno, cuando insistieron en la necesidad de que los municipios contaran con policía local.
El gobernador Miguel Ángel Yunes Linares ha usado esta propuesta de crear las policías municipales para presionar y agredir a los ediles surgidos de Morena, a cuyos habitantes ha amenazado con retirar su deficiente policía estatal, dado que los nuevos alcaldes no se han sometido a sus caprichos.
¿Por qué Yunes Linares ha insistido en crear corporaciones policiacas municipales y, para ello, ha obligado a municipios urbanos como Poza Rica, Xalapa, Minatitlán y Coatzacoalcos, en manos de Morena, a destinar de sus presupuestos lo necesario para crear corporaciones policiacas y a que los nuevos elementos sean capacitados en su desprestigiada Academia de Policía, si su propio hijo, hoy candidato a sucederlo, lo considera como una propuesta errónea y torpe, porque lo mejor es centralizar el mando policíaco?
Ya pónganse de acuerdo.
No todo Vía Veracruzana se fue con Yunes
Todo parece indicar que la decisión de unirse a la campaña electoral de Miguel Ángel Yunes Linares por parte de la organización Vía Veracruzana, tradicionalmente alineada al PRI, no fue completa. El sábado, el candidato priista Pepe Yunes se reunió con fundadores y miembros destacados de esa organización para manifestarle su apoyo.
Falta ver qué aporte pueden dar estos personajes que, de entrada, se deslindaron de quien los reunió en esa organización, Felipe Amadeo Flores Espinosa, a la campaña de Pepe Yunes, con quien se reunieron y le expresaron su confianza y apoyo en su campaña por la gubernatura de Veracruz.
Señalaron como razón para mantenerse al lado del priista el que, a lo largo de más de 20 años de trayectoria, Pepe Yunes nunca ha sido cuestionado por falta de honestidad o resultados, sino que, por el contrario, goza de un amplio reconocimiento por su trabajo como gestor. “Tienes mucho que ofrecer a los veracruzanos. Queremos que ganes, sería lo mejor”, coincidieron los comensales en el desayuno de adhesión.
Pepe Yunes agradeció su interés y propuestas, mismas que significaron una valiosa contribución para el crecimiento y la transformación de Veracruz. Al desayuno acudieron el exdirigente estatal de Vía Veracruzana, Miguel Ángel Díaz Pedroza, así como los fundadores Raúl Ramos Vicarte, Zayda Lladó, Francisco Montes de Oca López, Francisco Mora Domínguez, Roberto Álvarez Salgado y Ricardo Olivares Pineda, entre otros.
