La organización Amnistía Internacional (AI) consideró que ‘‘la cínica respuesta del presidente Enrique Peña Nieto a la desaparición forzada de 43 estudiantes en el estado de Guerrero, hace dos años, ilustra la insensata actitud que ha sostenido el gobierno mexicano hacia los derechos humanos’’.
Erika Guevara-Rosas, directora para las Américas del organismo internacional, dijo que ‘‘la tragedia de Ayotzinapa ha expuesto cómo la administración del presidente Peña Nieto no se detendrá ante nada para encubrir las violaciones a los derechos humanos que ocurren en México’’.
Indicó que las autoridades han hecho todo lo que han podido para obstruir la justicia e intentar proteger su imagen. ‘‘Desde no haber impedido el ataque contra los estudiantes (de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos), hasta prevenir esfuerzos internacionales para descubrir la verdad y desestimar las quejas sobre la forma en que la investigación ha sido manejada’’.
Tesis cuestionadas
Amnistía recordó que también han dicho que los jóvenes fueron secuestrados por una banda criminal de la zona y que sus restos fueron incinerados en un basurero local. ‘‘Sin embargo, tras una investigación forense de un año, un grupo de expertos designados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos concluyó que era científicamente imposible que ese número de cuerpos fueran incinerados en un basurero en las condiciones que dicen las autoridades, conclusión que es compartida por otros expertos que han tenido acceso al caso’’, sostuvo.
FUENTE : LA JORNADA